“Mis abuelos me dijeron que siempre iba a viajar. Tuve una infancia en Colombia modelando el barro, crecí con el aire secando la cerámica y el fuego que transformaba todo ese material hecho por las propias manos”, afirmó el artista titiritero colombiano Wilson Ruiz, quien se presenta hoy en Río Cuarto.
En diálogo con Vicky Sagárnaga, el artista manifestó que sus primeros acercamientos al objeto fue a través de las cerámicas, “una tradición antigua, aborigen, originaria”
“Fue guardando mitos, leyendas y cuentos que mi abuelo transmitía a través de fuego, cuando se quemaba la cerámica. El titiritero es el Chaman, el hombre medicina, sanador, que canta, baila. Un mascarero y que anima el objeto. A partir de allí todo lo relacionado al títere animado”, relató.
Y añadió: “Cuando tuve la fortuna de ir a Bogotá a aprender teatro y mimo corporal dramático, me di cuenta que mis orígenes eran muy profundos. Me fui especializando en la animación del objeto y la narración oral”.
“Que el objeto cuente historias por si mismas es lo que buscamos. El actor tiritero es uno de los oficios mas antiguos de la humanidad. Es la posibilidad de como se empezó a cantar, a cocinar, a la danza. El actor tiritero es un nomada, nos permite pensar en nuestros ancestros y la memoria” entafizó.
Para Wlson Ruiz, “hay que pensar en los pueblos de América con un riqueza maravillosa, especialmente Colombia”. “Puros mitos con una enseñanza profunda para que los futuros ciudadanos puedan rehacer la nueva historia”
“Mi función social está relacionado con el movimiento, la palabra, el color, la recuperación de nuestra tradición. El arte cumple la función de poder recuperar todo esto. Y para eso hay que viajar, compartir con otras personas”, manifestó.