Es cierto que durante la era colonial estadounidense y parte del siglo XIX, la langosta era considerada como alimento de pobres y se asociaba con la degradación y la pobreza. Es interesante cómo la percepción de las langostas ha cambiado a lo largo del tiempo, debido a la disponibilidad, la forma que se cocina , se comercializa y a la influencia económica y cultural que han hecho que hoy en día sea un producto conocido y accesible.