Decidimos “descansar” de tanta planificación en nuestra vida, lo cual no se nos da naturalmente. Les contamos como nos va con todo lo que pasa cuando dejamos de planear y permitimos que la vida, las (Diosidencias) coincidencias, las personas que forman parte de nuestra historia simplemente pueda fluir y sorprendernos.
Y aunque planear es parte de nuestra vida, últimamente hemos dado espacio a lo extraordinario y espontáneo; seguimos aprendiendo a soltar, y hemos abierto los brazos a recibir todo lo que viene más allá de nuestro plan.