La agricultura Anahuaca hasta nuestros días sigue totalmente denigrada y olvidada.
A pesar de que la sociedad dominante sigue usufructuando sus conocimientos ancestrales –únicos en el mundo-, como es el maíz, el nopal, el chocolate, la vainilla, el amaranto, por citar algunos.
De la misma forma, el proceso de Desarrollo Humano Anahuaca desde la invención de la agricultura y el maíz, hasta la aparición de la cultura olmeca, es totalmente excluido de la historia antigua.
Más de 4500 años de intensa investigación, sistematización, trasmisión y síntesis del conocimiento, para formar las bases de nuestra civilización, pasan “desapercibidos” por la mayoría de los historiadores oficiales. La civilización del Anáhuac NO ESTA MUERTA, y justamente en ella radica el gran potencial de sabiduría, para enfrentar los retos de construir una sociedad más justa y humana.