Entregarse a Dios es el corazón de la adoración. Es la respuesta natural al amor y misericordia de Dios. Nos entregamos a Él, no por temor u obligación, sino por amor, "porque él nos amó primero." 1 Juan 4: 9-10
"Eso significa que no debes darle un voto al pecado en la forma en que conduces tu vida. No le des la hora del día. Ni siquiera hagas pequeños recados que estén relacionados con esa vieja forma de vida. Entréguense de todo corazón y de tiempo completo (recuerden, ¡han sido resucitados de entre los muertos!) En la manera en que Dios hace las cosas. El pecado no puede decirte cómo vivir. Después de todo, ya no estás viviendo bajo esa vieja tiranía. Estás viviendo en la libertad de Dios". Romanos 6:12-14 (MSG)
Pablo, después de pasarse once capítulos en el libro de Romanos explicando la gracia de Dios para con nosotros, invita entregarnos en adoración: "Por lo tanto, mis amigos, debido a la gran misericordia de Dios para con nosotros... ofrézcanse ustedes como sacrificio vivo a Dios, dedicado a su servicio y agradable a él. Esta es la verdadera adoración que deberían de ofrecer." Romanos 12: 1 (TEV). Cuanto más comprendamos el amor de Dios, más fácil se hace entregarse. ¿Cómo saber que Dios lo ama? Él ha dado muchas evidencias:
Dios dice que te ama; Salmos 145:9
Nunca te quita los ojos; Salmos 139:3
Le interesa cada detalle de tu vida; Mateo 10:30
Te dio la capacidad para disfrutar; 1 Timoteo 6:17
Tiene buenos planes para tu vida; Jeremías 29:11
Te lo perdona; Salmos 86:5
Es amorosamente paciente. Salmos 145:8Si quiere saber cuánto le importa usted a Dios, mire a Cristo con sus brazos extendidos sobre la cruz, diciendo "¡Así de tanto es que te amo! Prefiero morir que vivir sin ti." Dios no es un cruel que usa la fuerza bruta para someternos. El no trata de forzar nuestra voluntad sino que nos trae libertad, no la esclavitud. La mejor demostración de la entrega es la obediencia. Usted dice "Sí, Señor" a cualquier cosa que le pida hacer. Las personas entregadas obedecen la palabra de Dios, aún cuando parece no tiene sentido.
María esperó un milagro sin saber cómo, José confió en el propósito de Dios sin saber porque ocurrían las cosas. Cada una de estas personas estaba totalmente entregada a Dios. Usted suelta las riendas y deja que Dios haga su obra. La Biblia es muy clara sobre los beneficios que se reciben cuando entrega su vida totalmente a Dios.
Experimenta paz: "¡Deja de pelear con Dios! Si estás de acuerdo con él, tendrás por fin la paz y las cosas te irán bien." Job 22: 21 (NLT). Experimenta libertad: "Ofrézcanse a los caminos de Dios y la libertad nunca cesa... ¡[sus] mandamientos te liberan para vivir abiertamente en su libertad!" Romanos 6: 17 (Msg).
No hay nada más poderoso que una vida entregada en las manos de Dios. "Por lo tanto, entréguense completamente a Dios." Santiago 4: 7a (NCV). Jesús dijo, "Si alguien me quiere seguir, tiene que renunciar a las cosas que quiere. Tiene que estar dispuesto a entregar su vida a diario para seguirme." Lucas 9:23 (NCV). Ahora es tiempo de entregarse a la gracia, al amor y la sabiduría de Dios. "Entreguen su ser entero a él para ser usados para sus rectos propósitos." Romanos 6:13 (CEV)