En este episodio hablo de la necesidad de la pasión en nuestro día a día.
Gracias al fantástico artículo del domingo pasado en la Vanguardia de Xavier Marcet (aquí link hhttps://buff.ly/3LmLkWt).
Como decía Xavier Marcet:
Sin pasión no pasa nada. La pasión como encendedor de la razón. La pasión como suma de compromiso e ilusión. La pasión rompe la inercia que se derrama. La pasión permite dar sentido al esfuerzo y tenacidad.
Pasión, Propósito y Resultados forman un buen triángulo en la empresa.
La pasión puede ser una fuerza que te llena de energía y plenitud, es la materia prima con la que se construyen negocios, se crea arte y se ganan medallas olímpicas. Sin embargo, si no se tiene cuidado, la pasión también puede convertirse en una fuerza destructiva, que lleva al sufrimiento y la angustia. Pasión equilibrada, no tenemos que volvernos yonquis.