Delito sobre el delito. España y Cataluña formando parte de la misma, son espacios para la corrupción y la impunidad. Que el pequeño de la trama mafiosa del honorable, que el uno de los nuestros, el Henry Hill catalán y no irlandés, el espabilado y precoz usuario de guantes blancos de los Pujol haya estado en la calle cuando todos los datos le apuntaban como el valor en alza dentro de la famiglia, es un escándalo que se suma al escándalo político mafioso de Convergencia Democrática de Catalunya, ahora Partido Demócrata Catalán, que gobierna la Catalunya que dice dirigir a la desconexión.

Cómo le gustaría a los Pujol, a los políticos ex convergentes y ahora demócratas catalanes, que prostituida está ya la palabra demócrata y democracia. Que ensuciada. Que pervertida.

Cómo me perturba el nombre del Late Show televisivo de Andreu Buenafuente en la manipulada TV3 de Catalunya. Un show nocturno en el tono habitual del comunicador catalán, que de forma insólita fue permitido del 1999 al 2000 en la televisión del régimen corrupto de Pujol, ya en sus últimos estertores. Fallecería tres años más tarde, lo que no impidió que él y su familia siguieran desfalcando Catalunya como si no hubiera un mañana.

El nombre de aquel show era Cosa Nostra y, lo cierto es que casi no hay nada más que añadir.