El papa Francisco, en la sesión sobre inteligencia artificial que llevó recientemente a cabo el foro intergubernamental del Grupo de los Siete, también conocido como el G7, reflexionó sobre los efectos de esta nueva herramienta para el futuro de la humanidad, el Pontífice señalò que este medio tecnológico, es percibido por unos con entusiasmo, por las posibilidades que ofrece; mientras que por otros con miedo, ante los peligros que pudiera acarrear. Asimismo advirtió que, aunque la inteligencia artificial podría permitir la demo-cra-tización del saber y el progreso exponencial de la investigación científica, podría también aumentar la inequidad para aquellas naciones en desarrollo, entre clases sociales dominantes y las oprimidas, lo que podría alejar de una cultura del encuentro. ¿Tiene algo que ver la ética con la inteligencia artificial? ¿La inteligencia artificial podrá usarse de un modo que no prive de tomar propias decisiones, de pensar y de enseñar en las instituciones educativas a tener sentido crítico?