El actual debate presupuestario ya está mostrando algunas de las consecuencias más temibles de la pandemia a nivel económico: el alto endeudamiento. Según expertos, dentro de pocos años Chile podría estar pagando cerca de 2.000 millones de dólares solamente en intereses. Ni siquiera en el capital de la deuda.

Esta situación se traducirá en una merma gigantesca de recursos del Estado, además, en un ambiente político de incertidumbre, con una escena que encuentra a los partidos y coaliciones más polarizados y fragmentados que nunca.