¿Y cómo sé que yo conocí un gran amor en esta vida?
Un gran amor no es simplemente encontrar a una persona a la que querer mucho y que nos quiera mucho, generando esa circularidad de dar y recibir… sino porque, más allá de eso, o incluyendo eso, un gran amor es esa persona que te enseña a amarlo todo, de amar a todos.
Lo loco es que la única manera de amarlo todo, de amar a todos, es amar a alguien de verdad.
Ese es un criterio para saber si conocí un gran amor, es saber si ese amor me abrió al amor a todos los demás o si pasa al revés: que nos encierra en nosotros mismo y en esa relación. Si no cerró, no es un gran amor, es un egoísmo a dúo o como se lo quiera llamar, pero no es un gran amor.
Esto que decimos del amor también lo podemos decir del maestro: ¿encontraste en tu vida un gran maestro? Un gran maestro espiritual, un gran maestro de vida.
¿Quién es un gran maestro? Un gran maestro es el que te enseña a ser discípulo de todos y de todo, por eso es importante encontrar un gran maestro, porque sin un gran maestro no aprendemos de verdad hasta el final la aventura que es recibir. Y si no hacemos la aventura de recibir lo que hay no vamos a poder hacer la aventura de dar.
Yo creo que no nos hacemos cargo de lo importante que es tener un maestro espiritual.
Nuestra vida, si tenemos el día del Señor cómo eje, el domingo, podemos ver la Eucaristía como un discipulado donde el maestro es Jesús. Somos discípulos de Jesús en la vida, pero en concreto en la Eucaristía, tenemos la disciplina de la escucha, para aprender, para incorporar, hacer carne de nuestra carne la sabiduría de Dios.
Un gran amor y un gran maestro son una puerta, una puerta que nos enseña a vivir. Jesús es una puerta.
Una puerta es un lugar de tránsito, un lugar que te lleva a otro lugar, nos abre a otro espacio. Ese es Jesús, nos abre a la dimensión más profunda de nuestro ser, a lo más auténtico, a lo más genuino.
También la puerta tiene la función de “discernir”, que puede pasar al otro lado de la puerta y qué no. Qué es trigo y qué es cizaña en mi vida.
¿Qué es lo que se discierne? ¿Porqué hay una puerta?