Parar. Sobre eso escribí en la última publicación de Instagram este domingo al no poder publicar el viernes cuando salió este capítulo. Fue porque no llegué a tiempo... Y eso me hizo reflexionar sobre la necesidad de parar.
Cuando un para puede detenerse a observar, con más o menos calma, lo que le rodea, puede ver si lo que hace está en consonancia con lo que promulga de sí mismo y puede valorar qué opción escoger en un momento dado.
Cuando uno se para de forma consciente puede que se de cuenta de que no le queda más remedio que continuar en la rueda que esté girando en ese momento, aunque se le haga duro seguir su ritmo. Con el simple hecho de parar habrá podido ver que tendrá que buscar la forma de salir de ella para intentar, al menos, tener un poco más de esa calma.
De eso os hablo hoy, de la necesidad de parar para poder seguir caminando.
Si te apetece escuchar mis reflexiones solo tienes que darle al play.