No podemos ver a Dios pero tenemos la convicción de que está con nosotros en todo momento. Esa misma fe es la que nos permite tener la gracia de Él y poder conectar con su palabra.
No podemos ver a Dios pero tenemos la convicción de que está con nosotros en todo momento. Esa misma fe es la que nos permite tener la gracia de Él y poder conectar con su palabra.