El enfrentar circunstancias adversas pone a prueba nuestra fe en Dios. Estos tiempos difíciles son permitidos por Dios, pero con un propósito eterno. La forma de reaccionar no tiene que ser enojarnos con Él o cuestionar Su amor a nosotros, sino aceptar que Sus planes son mucho más grandes. Tal vez no sabemos por qué pasa lo que pasa, pero Dios sí y tiene todo bajo control.
¡Seguinos en @ibsicomunidad en Instagram, Facebook y YouTube!