Se suponía que sería una mañana tranquila. Un reventón de llanta, un granjero amable… y luego, empezó a llover carne. Masas rojas, viscosas, imposibles de explicar. Lo que comenzó como un accidente en carretera, se convirtió en una pesadilla donde el cielo escupía restos humanos y los ojos te miraban desde las paredes. Esta es la historia de Rebecca Madison, una mujer atrapada entre el amor por su madre… y el horror de un apocalipsis hecho de carne.