En un mega operativo, personal de Carabineros detuvo a 17 personas acusadas de pertenecer a una supuesta organización, que realizaba actos de desorden público y otros hechos delictivos durante las manifestaciones en Iquique post estallido social.

Una compleja investigación del Ministerio Público permitió gestionar las órdenes de detención y concretar los arrestos. Ahora viene lo difícil: cómo la Fiscalía logrará probar la participación de los detenidos en esta asociación ilícita, informalmente conocida como "primera línea". 

Extraoficialmente se ha mencionado que algunos detenidos tendrían vínculos con partidos políticos, pero de momento, Carabineros no ha entregado información oficial al respecto.