José Luis Ábalos, entonces ministro de Transportes, se alojó una noche en el Parador de Sigüenza, en Guadalajara, acompañado de una joven en la primavera de 2021. Con él estaban su asesor Koldo García, tres escoltas y otras dos mujeres.
Según varios empleados del hotel, aquella noche se celebró una fiesta en una zona privada del comedor que luego continuó en la suite 210, la única con salón anexo al dormitorio. Al día siguiente, personal de limpieza y mantenimiento encontró la habitación con desperfectos, manchas de vino, el mando de la televisión roto y restos de lo que identificaron como cocaína sobre el escritorio.
Los hechos ocurrieron en mayo de 2021, semanas antes de que Ábalos fuera cesado del Gobierno. En ese momento aún estaban vigentes algunas restricciones del estado de alarma, aunque el ministro, como autoridad delegada, tenía libertad de movimientos.
Uno de los trabajadores aseguró que, por el aspecto de las mujeres presentes, algunas podrían ser prostitutas. La fecha exacta no ha podido confirmarse, pero los testimonios coinciden en situar la escena un fin de semana a finales de mayo.