Las lecturas de este domingo nos hablan de algo fundamental: la coherencia. Coherencia que se traduce a la justicia, a la búsqueda del bienestar para todos, a procurar construir el Reino de Dios. También son lecturas que nos invitan a observar nuestros comportamientos y corregirlos si hace falta. En fin, toda una llamada a Amar y a ser Amado: ¿te atreves?

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La misericordia es el tema central de la liturgia de la Palabra. Misericordia que se expresa en ese encuentro del Señor con nosotros, en nuestra realidad, con lo que somos y hemos dejado de ser. Sí. Allí, incluso en el pecado. Lo importante será descubrir que todo es posible cuando nos abrimos al amor. ¿Te atreves?

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Segunda temporada del Evangelio Desafiante. Hoy se inaugura con una buena pregunta: ¿qué implica ser discípulo de Jesús? La respuesta es clave: desapego y aprender a cargar con la cruz.

También será clave comprender que conocer la voluntad de Dios es un regalo de Dios y como tal debemos abrirnos a ella, en clave siempre de amor. ¿Sabes por qué? Porque Dios te ama con locura.

Vívelo así y déjate desafiar por el Evangelio.

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¿Cómo es tu sentido de hospitalidad? ¿Cómo te comprometes en a acogida del otro y en la misión cristiana de hablar y vivir en clave de un amor comprometido? ¿Cómo anda tu actitud ante la vida: de agobios, estrés, ansiedad y desconsuelo o por el contrario, de atención, calma y escucha de la voluntad de Dios? Preguntas claves en esta sesión del Evangelio Desafiante

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El evangelio es una llamada de atención para cada uno de nosotros:

¿Eres tú el maestro de la Ley que solo hace preguntas que parece que no comprometen?

¿Eres tú uno de los bandidos que dejan al otro sin nada?

¿Eres tú como el sacerdote que pasa de largo frente al sufrimiento?

¿Eres un samaritano light que solo se implica hasta cierto punto?

O

¿Eres como el buen samaritano que lo entrega todo sin esperar nada a cambio? Tu respuesta es clave

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Jesús nos llama a Evangelizar. La pregunta es: ¿cómo? Primero, reconociendo que la llamada no es nuestra sino de Él y siempre en la clave del amor que transforma.

Segundo, compartiendo en la Iglesia esta llamada. Evangelizar significa hacer comunidad y vivirla a plenitud.

Tercero, poniéndonos en camino, con todo lo que esto supone: alegrías y tristezas, dolores y refuerzos.

Por último, viviendo la base de la Evangelización que no es otra cosa que Jesús del cual proviene todo. ¿Te atreves?

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La clave de este domingo se enmarca en una realidad tan profunda como lo es la Llamada al Seguimiento de Jesús. Un seguimiento que va más allá de una vocación a la vida sacerdotal y/o religiosa. Va a lo profundo de nuestra vida de Fe como creyentes en un mundo que necesita descubrir que Dios es Amor, Misericordia y Comunión. ¿Te atreves?

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Tres preguntas claves se nos presentan hoy:

¿Quién eres frente a Dios? Esta pregunta no nos puede dejar indiferentes sino que nos ha de llevar a replantearnos incluso que hacemos con los demás.

b. ¿Qué dice la gente de tu alrededor sobre Jesús? Un ejercicio para captar el sentir de la fe en tu entorno

c. Jesús, ¿quién es para ti? Sabes que la respuesta lo transforma todo. Ánimo

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Misericordia, perdón, compasión, empatía y compromiso. Todas estas son palabras sinónimas en las lecturas de este domingo. ¿Te reconoces amado y perdonado por Dios? ¿Sabes que el amor transforma y mueve al perdón? Estos son grandes retos hoy en día. ¿Estás dispuesto?

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La muerte, esa radical experiencia que rompe con todas nuestras seguridades, nuestras comodidades, todo lo que alguna vez pensamos hacer y dejamos para después. Es una realidad que nos confronta con el límite de quiénes somos y de lo que amamos. Pero sabemos por fe que la muerte no tiene la última palabra: Jesucristo rompe con ella, por puro Amor. Eso lo transforma todo.