Estos días se celebra en San Francisco una nueva edición de la Game Developers Conference. Del evento nos han llegado algunas demos técnicas del futuro, como cada año, pero sobre todo nuevas muestras de hasta qué punto está cambiando todo esto: uno de los grandes anuncios es un Dragon Ball para móviles y los desarrolladores, además de aprender más sobre los últimos proyectos de sus compañeros, se reúnen para hablar sobre la posibilidad de montar un sindicato.
Y por aquí, mientras tanto, le hemos estado dando a Sea of Thieves, a Ni No Kuni II: El Renacer de un Reino y a A Way Out. Apetece hablar sobre los piratas de Rare, por las anécdotas, por el agua, por el Game Pass y también por sus carencias; Level-5, por su parte, suma y sigue con un JRPG muy a tener en cuenta, a pesar de que el espíritu del Studio Ghibli no está tan presente como en el título original; y ojo también con la fuga cooperativa de Josef "Piquito de oro" Fares, porque el uso de la pantalla partida va mucho más allá del gimmick.