El presidente estadounidense, Donald Trump, ha vuelto a criticar duramente a España por su bajo gasto en defensa y acusa al gobierno de Pedro Sánchez de "no jugar en equipo" dentro de la OTAN, intensificando la presión diplomática sobre el Ejecutivo español. Durante su encuentro con el secretario general de la Alianza Atlántica, Mark Rutte, en la Casa Blanca, Trump quiso poner el foco específicamente en nuestro país, abroncando públicamente a Pedro Sánchez ante el máximo responsable de la organización militar.
El presidente estadounidense insistió contundentemente en que todos los miembros de la OTAN deben elevar su inversión militar al 5% del PIB como compromiso mínimo, advirtiendo que España es la única excepción entre los aliados que se niega sistemáticamente a aumentar su gasto en defensa. Esta acusación coloca a España en una posición diplomática extremadamente incómoda.
Mark Rutte, por su parte, también expresó públicamente dudas sobre Pedro Sánchez y la capacidad real de su gobierno para cumplir los compromisos de defensa con la OTAN mientras mantiene un gasto inferior al 3,5% del PIB. El secretario general de la Alianza respaldó implícitamente las críticas de Trump, lo que representa un respaldo institucional a las presiones estadounidenses.
Esta doble reprimenda pública de Trump y Rutte evidencia el creciente aislamiento de España en la Alianza Atlántica y el deterioro de las relaciones transatlánticas bajo el gobierno de Sánchez. La negativa española a incrementar significativamente el gasto militar contrasta con el aumento generalizado del resto de países europeos tras la invasión rusa de Ucrania.
La postura de Sánchez de mantener el bajo gasto en defensa mientras España se beneficia del paraguas de seguridad de la OTAN genera críticas por ser una actitud de "polizón" que aprovecha la protección sin contribuir proporcionalmente.