Un terrorista mató a dos personas e hirió gravemente a otras tres en un ataque con coche y cuchillo contra la sinagoga de Heaton Park en Manchester durante la celebración del Yom Kippur, la festividad más sagrada del calendario judío. El ataque representa uno de los actos de terrorismo antisemita más graves en suelo británico de los últimos años.
La policía identificó al atacante como Jihad Al-Shamie, ciudadano británico de 35 años de ascendencia siria, quien embistió violentamente el recinto con su vehículo antes de apuñalar a varios fieles congregados. Los agentes le dispararon tras temer que portara explosivos, posteriormente confirmados como falsos tras la inspección forense del lugar.
Las autoridades arrestaron a tres personas adicionales por sospecha de comisión, preparación e instigación de actos terroristas, lo que sugiere una posible red de apoyo detrás del ataque. Al-Shamie llegó al Reino Unido siendo niño y obtuvo la ciudadanía británica en 2006, sin registros previos en el programa antiterrorista Prevent que monitoriza posibles radicalizaciones.
El ataque duró seis minutos y fue finalmente detenido cuando los propios congregantes bloquearon heroicamente las puertas de la sinagoga, impidiendo que el agresor accediera al interior donde se encontraban más fieles. El primer ministro Keir Starmer voló urgentemente desde Dinamarca para presidir una reunión de emergencia Cobra, calificando al atacante de "individuo vil" que "atacó a los judíos por ser judíos".
Un estudio reciente revela el dramático deterioro de la seguridad percibida por la comunidad judía británica: el 35% se sienten actualmente inseguros, frente al apenas 9% antes del 7 de octubre.