El Tribunal Constitucional ha acordado por unanimidad no admitir a trámite el recurso del exministro de Transportes José Luis Ábalos contra el aval del Congreso de los Diputados a la investigación de la Guardia Civil en el caso Koldo, iniciada antes de que la Cámara concediera el preceptivo suplicatorio para que el Tribunal Supremo pudiera imputarle. Este varapalo judicial cierra una de las estrategias de defensa del exministro.
La decisión, adoptada por la Sección Segunda de la Sala Primera del Constitucional, inadmite rotundamente el recurso de amparo de Ábalos contra la resolución de la Mesa del Congreso del 16 de enero, que consideró que su función como diputado no se había visto afectada por la actuación de la Guardia Civil previa al suplicatorio solicitado por el juez.
El Tribunal fundamenta su decisión en «la manifiesta inexistencia de violación de un derecho fundamental tutelable en amparo». Esta contundente argumentación deja sin base jurídica las alegaciones del exministro sobre supuesta vulneración de sus derechos como aforado en el momento de las investigaciones policiales.
En diciembre pasado, la defensa del exministro pidió al Tribunal Supremo la nulidad de toda la causa judicial, alegando que la UCO interceptó ilegalmente sus comunicaciones mientras seguía aforado como diputado. Ábalos denunció la vulneración de su derecho a la privacidad y del secreto de las comunicaciones.
El exministro sostuvo en sus alegaciones que todas las actuaciones practicadas por la Guardia Civil hasta la concesión del suplicatorio debían ser declaradas nulas de pleno derecho. Sin embargo, el Constitucional rechaza esta tesis por unanimidad, incluyendo a los magistrados de nombramiento progresista, lo que refuerza la solidez de la investigación judicial.