“Por la boca muere el pez”, “en boca cerrada no entran moscas”, “el que tiene boca se equivoca”, “eres dueño de tus silencios, pero esclavo de tus palabras”...
Es decir “!¿POR QUÉ NO CALLAS?!”
La prudencia esa bonita virtud que cada vez escasea más, parece que de todo tenemos que opinar, tenemos que dar siempre un consejo, proclamarnos mártires de la verdad y hay veces que callar es la mejor opción, porque lo que sale por esa boquita no tiene vuelta atrás.
Acompáñanos a desentrañar esas metidas de pata con nuestra pareja, familia, amigos y aquellas que pasaron a la historia.