El Seminario Diocesano de Bilbao, y fieles a la cita del Adviento, -fecha que coincide con el día de la Inmaculada en el que se celebra la jornada anual del Seminario-, nos presenta como novedad este año la posibilidad de colaborar con ellos mediante la compra de un Belén de Navidad para montar fácilmente. 8 de diciembre, celebración del Día del Seminario.

Belén de Navidad

El Belén se puede adquirir, al precio de 6 euros, en la tienda de la Basílica de Begoña, o bien encargarlo, llamando al teléfono 94 424 38 97.

Desde hace varios años, durante estas fechas, el Seminario Diocesano de Bilbao prepara diferentes materiales como las Coronas de Adviento para las familias, o el Calendario de Adviento. Este año es un Belén para montar fácilmente y poder colocarlo en cualquier lugar de nuestras casas, colegios o lugares de trabajo.

Cinco seminaristas en este curso

Ignacio Fernández, Rector del Seminario Diocesano de Bilbao, recuerda que "Patxo Ateca, Roberto Carlos Barón, Lander Basauri, Gonzalo Uriarte y David Rivillas son los cinco Seminaristas, que han iniciado el curso 2025-2026. Los cuatro últimos están instalados en el Seminario Diocesano de Pamplona, donde continúan su etapa de formación académica a partir de ahora. Son Seminaristas en primera fase de formación, etapa Discipular. Patxo, por su parte, se encuentra en la etapa de síntesis vocacional y este curso esta en la Unidad Pastoral, UP, Oiz Anboto. Este nuevo curso representa un paso importante en su camino vocacional y en su preparación integral para el ministerio sacerdotal".

8 de diciembre, Día del Seminario

Ignacio comenta que "el 8 de diciembre de 2025, solemnidad de la Inmaculada Virgen María, se celebra el Día del Seminario. Este año bajo el lema «Sembradores de Esperanza – Itxaropen-ereileak» unido al Jubileo  2025 convocado por el Papa Francisco. En las eucaristías se pedirá por el Seminario, se pedirá por los seminaristas, se pedirá también la aportación económica, como suele ser habitual y luego cada seminarista da testimonio allí donde se encuentra en sus parroquias".

Patxo Ateca, Seminarista en tercera y última fase de formación, etapa de Síntesis Vocacional, afirma que "es un día importante para pedir por nosotros para que Dios esté con nosotros en este camino, para que nos acompañe y nos dé fuerza para continuar pero también para ser conscientes de que el Seminario existe y para pedir por más vocaciones porque necesitamos sacerdotes".

Ignacio añade que "el lema sobre todo es sensibilizar, todos somos importantes, a la vez que todos somos pocos y todos somos necesarios en la Iglesia. Es necesario para mantener una comunidad, para suscitar, para animar a esa comunidad cristiana a que viva la fe, a que la celebre. A cuidar también de los pobres, de los enfermos, la tarea que tenemos que hacer en las parroquias. Es un día especial para rezar y para que los seminaristas actuales sientan el cariño, sientan que el Señor está ahí cerca con ellos".

¿Cómo despertar las vocaciones?

Ignacio declara que "despertar las vocaciones es un tema más complicado y más complejo. Unos agentes importantes para el Anuncio, para despertar vocaciones son los propios seminaristas, ellos con su vida, con su presencia. El testimonio es clave y fundamental.

Patxo subraya "también la importancia del testimonio de los sacerdotes. La vida de los sacerdotes, su entrega, su trabajo, el cómo se dan a la comunidad hace que ese estilo de vida, esa vocación, esa decisión que ha tomado esa persona hace que tú también digas, ¿puedo yo querer esto para mi vida? ¿Puede ser que Dios me llame a esto? También que somos jóvenes y llegamos a más jóvenes. El joven suele llamar al joven. Y la familia. Una vocación al final muchas veces crece dentro de la familia. Que no se ponga trabas, que es una decisión y la familia es importante que acompañe, que no se sienta solo. A mí me gusta pensar que la vocación no es únicamente mía sino que también es de mi familia porque me han estado acompañando a lo largo de estos años, no solo desde que entraba en el Seminario sino también antes, desde que planteé esta inquietud en casa".

"Estoy muy a gusto en la Unidad Pastoral, UP, Oiz-Anboto. Es cambiar la ciudad, antes estaba en Rekalde, Bilbao, a una zona más rural. Hay muchísimo trabajo, catequesis, postcomunión, hay Cáritas también y bastante funeral. Me han acogido muy bien".

"Que estemos abiertos, que no nos dé miedo y que si alguien tiene alguna pequeña inquietud, alguna llamada, que se ponga en contacto con el cura, con el párroco que tenga más cercano y que pueda hacer un discernimiento porque el Señor sigue llamando y lo que tenemos que hacer es acoger esa llamada", concluye Ignacio.

"Que la gente no tenga miedo a preguntarse, a plantearse, "Señor, pero tú, ¿Qué quieres de mí? ¿Dónde me quieres en mi vida?. Un buen acompañamiento es muy importante para la vocación", concluye Patxo.