Una novela negra protagonizada por negros. Así resume Félix Machuca la historia que nos cuenta en Cuaresma de sangre, la novela con la que ha ganado el Premio Ateneo de Sevilla, que se ha fallado recientemente en un enclave tan mágico como el Real Alcázar.Después de dos años sin gala por culpa de la pandemia, por fin este premio desplegó toda su belleza en una cena celebrada en Sevilla. Un acto de amor a los libros y a la tradición. A las letras y a las historias que solo encontramos en las páginas que llevan el sello del Ateneo, uno de los premios con mayor linaje de todo el país. Es el segundo más antiguo, solo superado por el Planeta, y su nómina de ganadores hay grandes de las letras, como Juan Marsé, Juan Eslava Galán, o Caballero Bonald. Lleva 54 ediciones. Todo un veterano en plena forma. A la última se han presentado 249 novelas.Cuaresma de sangre nos hace viajar al siglo XVII, a una Sevilla sucia, puerta y puerto de Indias, donde trabaja Domingo Congo, un paje negro del duque de Medina Sidonia, que ha llegado a ser alguacil de la comunidad negra sevillana. Y le llega un soplo, una información confidencial: algo trágico va a ocurrir. Y entonces se pone manos a la obra, y desvela los intereses portugueses en alentar una revuelta contra Felipe IV en el Jueves Santo de 1641. El premio Ateneo Joven se ha distinguido por descubrir nuevas voces. Y le auguramos un gran futuro a Patricia Jiménez, que ya tanteó el terreno de la novela policiaca en una obra anterior, pero que ahora ha volcado toda su pasión por el género en No mires al pasado. Cinco historias que se arman en un puzle perfecto, con un cadáver que aparece a las orillas del ría de Nervión.Las dos obras serán publicadas en otoño por la editorial Algaida, cuyo editor Miguel Ángel Matellanes subrayó que este año habían ganado dos novelas negras, pero con planteamiento y marco histórico distintos. Onda Regional estuvo en Sevilla, recogiendo todos los sonidos de la noche. Y ahí lleváis el reportaje completo, con todas las voces...