Creía saberlo todo a casi todo del MX-5. Pero no es así. Esta es una de las cosas que más me gusta de la revista CEROaCIEN, que por mucho que sepas de un tema siempre vas a aprender algo, bajan a un nivel d detalle, en mi opinión, nunca visto.
Os lo sigo siempre, es el sueño de cualquier periodista y de cualquier aficionado: Información fiable, de calidad y no siempre conocida. Para mi CEROaCIEN es una revista imprescindible.
Y aunque seguro que yo lo sabéis, para los nuevos, vuelvo a recordar que CEROaCIEN solo se vende online y que si eres garajista tienes un trato especial: Usa el código GH5
Sí, es verdad, tengo debilidad por este coche. No soy el único: Casi un millón y medio de personas comparten mi debilidad y se han comprado uno. Es el descapotable más vendido de la historia. Te lo puedo asegurar: Este éxito no es causal… vamos a analizar la historia del primer MX-5, te voy a contar algunas curiosidades y te vamos a ayudar… por si te animas a comprar uno.
Hay pocos coches que conozca mejor que el MX5… probé una de las primeras unidades que llegaron a España, después hice una larga prueba individual y más tarde multitud de comparativas. Ya como clásico he probado otras cuantas veces el NA, he estado en la presentación de TODAS, de las cuatro, tengo varios libros sobre este modelo y he estrenado dos MX-5, el NC y el ND.
Mazda tenía una potente filial en los EE.UU. de Norteamérica, con la misión de encontrar oportunidades en ese mercado. Contrataron a Bob Hall, periodista del motor y gran aficionado a los deportivos. Bob tenía claras dos ideas. Muy claras. La primera que el hueco dejado por los pequeños deportivos europeos como Lotus, MG o Triumph no lo había llenado ninguna marca ni ningún modelo. Deportivos y roadster divertidos y accesibles.
La segunda idea: No era cuestión de prestaciones. El opinaba que “Los coches deportivos han de tener un cierto nivel de rendimiento, pero sobre todo han de ser divertidos de conducir”. Convenció a los japoneses, cosa nada fácil, que comenzaron a trabajar en tres conceptos: Motor y tracción delanteros, motor central con propulsión posterior y motor delantero con propulsión posterior. De esta última propuesta se hizo responsable al centro de diseño de Mazda en Norteamérica.
Fue en la primavera de 1984 cuando se reunión la cúpula de Mazda para decidir qué proyecto iba a ser el ganador… y parecía que el coupé de tracción delantera tomaba ventaja… ¿te imaginas el MX-5 de tracción delantera? Yo no… Y es que de los dos estudios hechos en Japón se descartó en el motor central por cuestiones de complejidad y porque ya había modelos, como el Pontiac Fiero y el Toyota MR2, que ya recurrían a esa solución.
Pero al final venció la propuesta americana, por su belleza… y por ser la única descapotable. Me resulta sorprendente que los diseñadores japoneses no propusieran versiones descapotables cuando lo que se quería era hacer pequeños deportivos ingleses de mecánica actual… que eran mayoritariamente descapotables.
Cuando veo una radiografía del MX-5 o el chasis de viga central con todos sus elementos… me parece estar viendo una obra de arte. Y estaréis conmigo en que uno de los elementos que hacen que conducir un coche sea algo que se disfrute mucho, es el cambio. ¿Cómo debe ser un cambio manual de un coche deportivo? Debe tener tres cualidades: Tener una dureza justa, un tacto preciso y “metálico” y unos recorridos cortos. Esto no es un secreto y para los ingenieros de Mazda era una prioridad. Partieron del excelente cambio del motor del Rx-7 pero pusieron una condición: Desde el punto muerto a cualquier relación, el recorrido no podría ser mayor de 50 mm.
El sólido chasis de viga central, el buen reparto de pesos entre ejes y la ligereza del conjunto, por debajo de la tonelada, permitieron que el Mazda MX-5 tuviese un comportamiento muy ágil, muy neutro y de enorme eficacia.
Este modelo se el Salón del automóvil de Chicago, el “Autoshow” de 1989, fue protagonista destacado y llegaron una lluvia de encargos. Como curiosidad os diré que tiene particular mérito, pues en ese mismo Salón se presentaban coches tan notables como el Nissan 300ZX y su majestad el Honda NSX… ¡qué tiempos! La verdad es que he sido un afortunado por vivir esa época.
Y qué decir de la prensa... os leo unas líneas de lo que publicó la revista “Road & Track”: “Acaba de nacer una estrella. ¿Qué se puede decir esto? Que ha robado el corazón a todos los periodistas que lo han probado”.
Cuando probé este coche me paso como a los norteamericanos: Me robó el corazón. Ya había probado algunos roadster y spider británicos e italianos y me encantaban. Los británicos habían desaparecido y desde luego eran coche tirando a rudos y los italianos, como el Fiat 124 Spider o el Alfa Spider, tampoco destacaban por el refinamiento de sus motores o de sus suspensiones, en ambos casos con eje rígido detrás. El Mazda MX-5 unía lo mejor de los dos mundos. Ofrecía todas las sensaciones, sino más, de aquellos coches, pero con un refinamiento y una calidad nunca vistas… ¡y a precio asequible!
No era muy potente, pero si era muy rápido en carreteras de curvas, son de su afinado chasis, escaso peso, alegre motor y excelente cambio, te permitían llevar un ritmo endiablado, superior incluso al de modelos más potentes…
Y es que si en los 90 comprar un Mazda MX-5 era una buena idea, ahora lo, es más. Es un coche que pese a su calidad y su mito sigue siendo asequible. ¿El secreto? Que se han fabricado muchos. Si de este coche se hubiesen fabricado pocas unidades, valdría el doble o el triple fácilmente.
Pero el precio es muy variable en función de los años, la motorización, los extras y el estado del coche. Mi consejo es que no compres “inventos”, coches con suspensiones extra-rebajadas, motores potenciados e incluso con turbo. Lo bueno de este coche es su equilibrio, y con estos “inventos” lo pierde.
Da prioridad al estado de la unidad por encima de los años y los kilómetros. Son coches y motores muy duros y que en general no han recorrido muchos kilómetros. El coche cuidado, aunque tenga más de 200.000 km, es una buena opción.
Precios razonables para modelos con motor 1.8 podría ser entre 10.000 y 15.000 €. Pero sinceramente, un 1.6 de 113-116 CV es más que suficiente y podrás encontrarlo por unos 2.000 o 4.000 € menos.
Lo mejor: Estos coches no van a dejar de subir de precio. Poco o mucho, rápido o despacio, pero son una inversión garantizada.
¡Que coche tan excepcional! Y una prueba de que la potencia y el lujo no lo es todo. Para los verdaderos aficionados lo importante es el disfrute al volante y te aseguro que con este coche vas a disfrutar más que con coches del doble o triple de potencia…