La Tertulia de los Lunes con Gabriel Budiño, Martín Bueno, Patricia González y Martín Moraes.
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La vigencia de la coalición multicolor volvió a ponerse en entredicho en los últimos días, a raíz de algunas decisiones políticas y declaraciones que levantaron la temperatura del debate.
La semana pasada, Cabildo Abierto sacudió el tablero al votar junto al Frente Amplio varios puntos clave de la Rendición de Cuentas, que los partidos Nacional, Colorado e Independiente decidieron no acompañar.
Se trata de los artículos que habilitan el incremento del tope de endeudamiento neto y de partidas extra para el Ministerio de Salud Pública, la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y el Ferrocarril Central. Según el gobierno, esas medidas eran necesarias para saldar obligaciones heredadas de la gestión anterior.
En filas blancas, coloradas e independientes, el gesto cayó mal: lo vieron como un error que debilita a la coalición opositora y le resta credibilidad de cara a 2029.
Cabildo Abierto, por su parte, se defiende: asegura que su voto fue un acto de responsabilidad, que busca asegurar servicios básicos y honrar compromisos asumidos por el Estado.
Además, el líder cabildante, Guido Manini Ríos, respondió con dureza a quienes criticaron a sus diputados, los calificó de “hipócritas” y “cínicos” y los acusó de posar de opositores “intransigentes”, mientras respaldan posturas que su partido rechaza, como la “ideología de género”, la “retención de la cuota sindical” o la “venganza por el pasado reciente”.
Manini ya había advertido, luego de la segunda vuelta de noviembre, que una coalición en la oposición no tenía sentido y que su fuerza política resolvería qué proyectos de ley acompañar.
En la Torre Ejecutiva, en tanto, dicen que no hubo negociación con Cabildo, pero sí diálogo. Y remarcan que este gesto distingue a una “oposición racional” de otra que tachan de “intransigente e irracional”.
Lo cierto es que lo ocurrido con la Rendición de Cuentas podría repetirse pronto, cuando el Parlamento comience a analizar el próximo Presupuesto Quinquenal.
En este contexto, mientras el Frente Amplio busca avanzar en acuerdos puntuales, la oposición muestra fisuras que reavivan la pregunta: ¿existe todavía la coalición multicolor?