A finales de 1976 Seguida, la banda de
rock latino que había sorprendido a propios y extraños haciendo una música de
gran calidad en el sello Fania, epicentro de la salsa neoyorquina, grabó su
segundo álbum, On Our Way To Tomorrow (En nuestro camino al mañana). Seguida,
que ya contaba con la dirección musical de Randy Ortiz, venía de hacer una gira
por varias universidades americanas y había congregado para la grabación a una
constelación de estrellas invitadas. Fue un disco más experimental que el
primero suyo, Love Is, que tuvo tanto éxito. Quizás por eso, no funcionó en la
calle, aunque la banda si que tuvo infinidad de contratos para tocar. En La
Hora Faniática el camino al mañana de Seguida.