En este episodio exploramos esa presión silenciosa (y a veces ruidosa) que llega en la década de los treinta. ¿Por qué sentimos que deberíamos tener todo resuelto para esta edad? Hablamos de la expectativa de haber alcanzado nuestra mejor versión, el éxito profesional y personal, y cómo el reloj interno nos empuja a cumplir metas que a veces ni siquiera son nuestras. Compartimos historias, reflexiones y recordamos que no tenerlo todo resuelto está bien. La vida no es una línea recta, y cada quien va a su ritmo. ¿Es posible encontrar paz en medio de la incertidumbre? Spoiler: sí, y te contamos cómo. Si alguna vez te has sentido así, este episodio es para ti.