En la carrera de la vida donde a diario nos enfrentamos a desafíos que nos agotan, nos golpean, nos tumban y nos instan a desistir, a abandonarlo todo, los amigos de verdad, que nos quieren y nos aprecian puede ser ese motor de energía que nos levanta, nos motiva, nos alienta a seguir la batalla, a seguir luchando hasta lograr nuestros objetivos. Solo unas palabras de aliento de esos amigos pueden ser el factor que nos haga seguir cuando queremos desistir. En los amigos hay hermandad, son como la familia elegida por nosotros, por eso quieren nuestro bienestar como lo dice Proverbios 18:24 “El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; Y amigo hay más unido que un hermano”. Entonces la Biblia nos enseña que estar solos no es un buen aliado, debemos rodearnos de esas personas que nos motivan, que nos impulsan y brindarles también una amistad sincera donde también apoyemos al otro creando lazos de hermandad,
Proverbios 13:20 “El que anda con sabios, sabio será; Mas el que se junta con necios será quebrantado”,
Por último, pero no menos importante no queda más que decir que cultivemos una buena y hermosa amistad con el mejor amigo que podríamos tener Cristo Jesús, que nos guía por el camino de la vida, nos protege con su escudo protector, nos ama con su vida, antecede por nosotros, seca nuestras lágrimas y nos fortalece tal como lo dice Juan 15:13 “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”. Dios te Bendiga.