Un alma en Cristo https://unalmaencristo.my.canva.site/redessociales 🎧 Audio 109 📕 Libro II Un alma en Cristo 9 de junio de 1991 ℍ𝕚𝕛𝕠𝕤 𝕕𝕖 𝕞𝕚 𝕘𝕣𝕒𝕟 M𝕚𝕤𝕖𝕣𝕚𝕔𝕠𝕣𝕕𝕚𝕒 Mañana tenemos la reunión del Grupo de María Auxiliadora. Hay varias cosas que pienso decir, pero el Señor me quiere indicar, además, algo para el Grupo. Estoy en oración en mi habitación. Hijos míos, hoy de nuevo os llamo a seguirme. Como veis, no me canso de llamaros. A unos los llamo por su nombre, a otros los llamo en conjunto. Sois hijos de mi gran Misericordia. Ya en la Cruz os veía tal como sois y pagué por cada uno de vosotros derramando hasta la última gota de mi Sangre. Ya entonces os amaba con locura; con tanto ardor que no podéis comprender. Ahora os digo: hijos míos, gracias por seguirme, gracias por amarme, gracias por caminar en mi santo Nombre. Como veis, seguir en el Grupo de María Auxiliadora no os separa de vuestros quehaceres, no os aparta de la oración que, al contrario, debe acentuarse, pues es un grupo totalmente evangélico, es un grupo destinado a hacer lo posible para ayudar a vuestros hermanos a bien morir. Eso cuando lo podáis hacer, pues no debéis olvidar que estáis condicionados por el personal de las clínicas y por los familiares de los mismos enfermos; pero vosotros, en todo momento, debéis hacer todo lo posible para llegar al fin, que es el centro y misión de todo cristiano. Yo nuevamente os digo: seguidme, hijos míos. Mi Gracia está con vosotros, mi Amor os cubre y, a la cabeza del Grupo, está mi santa Madre. Decidlo a las gentes, decid vosotros a los demás que hacen falta muchas personas para esta labor. Ellas serán bienvenidas en el nombre de Dios Padre, acogidas por Dios Hijo, amadas del Espíritu Santo, el cual enviará sus gracias a manos llenas para todo el que se pone a caminar recorriendo el camino del Señor, evangelizando, sacrificándose por sus hermanos en mi santo Nombre, amando, sobre todo amándoos los unos a los otros, y viendo en los hermanos enfermos y necesitados mi rostro. No olvidéis que, cuando visitáis a un enfermo me visitáis a Mí; cuando dais de comer a un hambriento, a quien dais de comer es a Mí. No os olvidéis de las obras de misericordia, tened caridad y, sobre todo, venid a Mí. Procurad salir los días estipulados. No lo dejéis si la razón no es demasiado importante. Haced, con vuestro granito de arena, que el Grupo camine, se haga grande. Yo os aseguro que tendréis vuestra recompensa. Venid a Mí; os necesito, os amo, os bendigo Grupo María Auxiliadora (1991). Un alma en Cristo Libro II