Jornadas 4x3.
Un camino siempre escabroso. ¿Por qué será? De entrada cualquiera daría una respuesta de sentido común: el código de trabajo es una de las herramientas más importantes de la convivencia social.
Pese a su desgaste. Sí. Pese a la condición poco vigorosa de la cartera ministerial encargada de observar su aplicación. Y pese también al desgaste de los mecanismos de diálogo y negociación entre trabajadores, empresarios y gobierno: esa tríada que puede ser virtuosa para apuntalar la democracia o, sencillamente un órgano en desuso.
Así entonces, provocar modificaciones en la legislación laboral es un asunto delicado.
Quienes favorecen jornadas de doce horas cuatro días por semana aseguran que regular ese esquema aumentaría la competitividad, beneficiaría a sectores de alta productividad, reduciría costos a las operaciones de 24 horas, impulsaría la atracción de inversiones y generaría más empleo. Afirman también que los trabajadores tendrían mejor calidad de vida al disponer de tres días libres en lugar de dos, ahorrarían dinero en desplazamientos y, de paso, se fomentaría el consumo en la economía, ya que con más tiempo libre, aumentarían el gasto en turismo, comercio, entretenimiento y educación.
Los opositores a la iniciativa sostienen que más bien debería plantearse rebajar la jornada de 48 horas semanales como sucede en muchos países OCDE, impulsar acciones para fomentar la competitividad como la transferencia de conocimiento, el incremento en la formación, mejoras a la productividad del trabajo, así como impulsar proyectos de infraestructura vial, ferroviaria, portuaria y aeroportuaria que ayuden a disminuir por esa vía los costos a las empresas, antes que reducir el costo laboral. Aseguran que la jornada de 12 h/4 días afectaría la salud y, paradójicamente, la productividad misma del trabajador. Eso sin agregar el aumento de padecimientos y hasta muertes por cardiopatías e ictus cerebral, como reportan investigaciones de la Organización Internacional del Trabajo, OIT.
Lo cierto es que esta semana, el Congreso frenó la posibilidad de darle vía rápida a las jornadas 4x3. Un balde de agua fría para unos y un alivio para otros. Y sobre ello conversaremos mañana con el economista Fernando Rodríguez. Jueves a las 8 a.m. por la 98.7 FM de Radio Columbia.