Nadie duda que Estados Unidos pisa firme el "patio trasero".
El término ciertamente es repudiado, empero quienes lo escuchan lo entienden perfectamente.
Veamos solo algunos de los hechos más recientes: Javier Milei tuvo una contundente victoria en las legislativas del domingo. Se dice que los argentinos se enfrentaron a una elección entre dos miedos y que ganó el miedo de regresar a la era kirchnerista.
Pero lo cierto es que, además, Donald Trump tuvo mucho que ver en la crucial votación. Tanto así que los analistas estiman que será inevitable que gravite en el ciclo electoral venidero que tiene escalas próximas en Chile, Perú, Colombia y Brasil. También Costa Rica, claro.
El otro hecho es la presencia cada vez mayor en el Caribe. A este martes se contaban 57 muertos por la destrucción de las supuestas narcolanchas. Inicialmente, se dijo que las operaciones eran contra Venezuela. ¿Para terminar con el trasiego o para terminar con el régimen de Maduro? Eso no está claro aún. Lo que sí salta a la vista es que el operativo marítimo -que ya incluye operaciones terrestres encubiertas de la CIA- profundizó las severísimas desavenencias con Colombia.
El presidente Gustavo Petro, el más vocal de los anti trumpistas, no solo se quedó sin visa, sino que fue sancionado financieramente por ser -según Trump- jefe del narcotráfico. Pero la cuestión va mucho más allá de la feroz guerra de palabras entre ambos. Estados Unidos suspendió todas las ayudas al país desertificó a Colombia como nación aliada en la lucha contra las drogas y amenaza con elevarle más los aranceles.
Repasamos estos tópicos con el internacionalista Carlos Cascante.