En el último episodio del año, Diego comenta la nueva controversia con los Chinaokes y cómo la indignación puede convertirse en un llamado a la acción. Además, el papelón de la semana, cortesía de la presidenta ejecutiva del PANI, y cómo los “errores” del Poder Judicial siguen profundizando la percepción de que hay personas que están por encima de la ley en Costa Rica. También analiza cómo el presidente Chaves ha aprovechado este contexto para impulsar su (peligrosa) narrativa de que él debe estar por encima de la ley y libre de todo cuestionamiento, una idea que muchas personas han terminado comprando.