En medio de la incertidumbre que se vive en estos tiempos no podemos vivir preocupados o poniendo nuestra confianza en lo que el mundo pudiera hacer por nosotros. ¡Enfoquemos nuestra mirada en Dios! Sólo en Él encontraremos protección y provisión sobrenatural para cada día. Como creyentes, nos corresponde buscar la presencia de Dios a diario y entregarle nuestras cargas, para recibir Su paz  y continuar caminando en victoria.