Un trabajo bien remunerado, que se le daba muy bien y con mucho reconocimiento no era suficiente para Noemí Seva porque aquello no era su pasión.   Por eso, tras 9 años trabajando en el mundo de la moda, decidió embarcarse en su propio proyecto y dar salida así a su pasión: ayudar a las mujeres a recuperar la relación consigo mismas y construir relaciones sanas.   Noemí Seva tuvo claro desde muy joven que quería dedicarse a trabajar ayudando a las mujeres, por eso hizo trabajo social. Pero aquello suponía mucha burocracia y trabajo administrativo, además sentía que le faltaban herramientas.   Por eso dedicaba su tiempo libre a formarse en lo que le apasiona: el desarrollo personal.   📚 Pero la formación también se convirtió en la excusa para no dar el paso. El sentir que tenía que estudiar más, y más y más antes de poner su don al servicio de las personas.   Este es el síndrome del impostor que tanto sale en nuestras entrevistas de Casos Reales de Reinvención Profesional. Uno de los miedos más habituales cuando nos reinventamos.   De sus miedos, de su proyecto, del amor y lo que no es amor en las relaciones, nos habla Noemí Seva en la entrevista que te recomiendo que veas.   Y es que, ¿sabes qué? Que como ella destaca como uno de sus grandes aprendizajes: "no hay edad para nada. No es tarde para hacer lo que realmente te gusta. Estás en el camino que tienes que estar para sentirte preparada".   Y tú, ¿piensas que aún estás a tiempo para dedicarte a lo que realmente te gusta?

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