La realidad social taiwanesa es el resultado de siglos de mestizaje entre la población china, la inmigración llegada de todas partes del mundo y los pueblos aborígenes malayo polinesios. La norteña capital de esta isla es el mejor muestrario de tal diversidad. El mandarín es el idioma más hablado, en perfecta convivencia con otras lenguas; del mismo modo, esparcidos entre la retícula de calles y avenidas, se yerguen multitud de templos de todas las confesiones: budismo, taoísmo, cristianismo, islam… Nuestro paseo sonoro por la ciudad tiene como guía al director de la Oficina Económica y Cultural de Taipéi, José María Liu, y al responsable de comunicación de dicho organismo, Mariano Velasco. Después de subir al vanguardista rascacielos Taipei 101 visitamos el Museo Nacional de Palacio y el verdísimo entorno de la metrópoli, que tiene en las montañas de Maokong –donde cultivan un excelente té– uno de los rincones más apreciados por los amantes de la naturaleza. Además, la periodista de viajes de La Vanguardia Anna Torrents nos hace probar algunas llamativas especialidades gastronómicas de sus coloridos mercados callejeros.