China usa un ordenador cuántico para destruir códigos de seguridad y amenaza el sistema de Bitcoin
- Algo inquietante acaba de suceder en China. Un equipo de investigadores ha conseguido romper un candado criptográfico que, hasta hoy, se creía inquebrantable.
- Y lo más sorprendente es que no han necesitado un superordenador experimental. Lo han hecho usando un ordenador cuántico del montón, sin necesidad de tecnología secreta ni futurista.
- Este logro supone un paso gigantesco hacia el temido Q-day.
- El momento en que los ordenadores cuánticos serán capaces de descifrar todos los sistemas de seguridad que hoy protegen nuestras comunicaciones, nuestras cuentas bancarias... y hasta las criptomonedas como Bitcoin.
- Pero, ¿qué han conseguido exactamente?
- Han logrado factorizar una clave RSA de 90 bits.
- Puede sonar pequeño, pero es un hito.
- Porque RSA es la base de la seguridad en Internet.
- Romper una clave, aunque sea de pocos bits, demuestra que los métodos híbridos entre computación clásica y cuántica funcionan.
- Y eso, aunque ahora parezca inofensivo, abre la puerta a algo mucho más grave.
- Para que te hagas una idea, factorizar un número enorme —como los usados en criptografía de 2.048 bits— le llevaría millones de años a un ordenador clásico.
- Pero un ordenador cuántico, usando fenómenos de la física subatómica, puede hacerlo muchísimo más rápido.
- El equipo, dirigido por el profesor Wang Chao de la Universidad de Shanghái, ha utilizado una técnica llamada temple cuántico.
- ¿Qué es eso?
- Pues imagina un paisaje lleno de montañas y valles.
- Un ordenador clásico tendría que escalar cada montaña para encontrar el valle más bajo.
- Un ordenador cuántico, en cambio, aprovecha un truco de la naturaleza: el efecto túnel.
- Así, atraviesa las montañas como si fuera un fantasma, encontrando la solución en un instante.
- Lo más inquietante es que no han usado una máquina futurista.
- Han trabajado con un D-Wave Advantage, un ordenador cuántico comercial con 5.760 qubits.
- No es un portátil del futuro. No sirve para todo.
- Está especializado en resolver problemas de optimización... y aun así ha demostrado ser peligrosamente efectivo.
- Claro, muchos se preguntan ahora: ¿está Bitcoin en peligro?
- De momento, no.
- Bitcoin no usa RSA, sino un sistema basado en curvas elípticas, el ECDSA.
- Así que el ataque de Wang no afecta directamente a las criptomonedas.
- Pero cuidado, porque sí demuestra que la barrera que separaba la teoría de la práctica empieza a agrietarse.
- Para robar Bitcoin, un atacante solo tendría que capturar la clave pública de una cartera...
- Y luego, usando un ordenador cuántico, calcular la clave privada para vaciarla.
- No es posible hoy.
- Pero cada avance en computación cuántica se acerca ese escenario.
- Eso sí, aún no es el fin del mundo.
- Los ordenadores cuánticos actuales son propensos a errores.
- Sus qubits no tienen sistemas de corrección automática.
- Eso nos da tiempo. Pero no mucho.
- Los gobiernos y los bancos ya están moviéndose para adoptar criptografía postcuántica.
- Bitcoin, sin embargo, lo tendría mucho más complicado.
- Cambiar su sistema de seguridad exigiría un acuerdo global entre mineros, desarrolladores y usuarios.
- Algo casi imposible... salvo que una amenaza inmediata les comprometa a todos.
- Por ahora, el apocalipsis digital sigue sin fecha.
- Pero cada nuevo avance como el de Wang... oscurece un poco más el horizonte.
- Y cuando el Q-day llegue, no avisará.
- Será rápido. Será brutal.
- Y toda la confianza que hoy tenemos en la seguridad digital... podría evaporarse en cuestión de horas.