Han pasado como dos semanas que no hay acción con mi amigo Luis me llama todos los días pues le urge coger con mi esposa, por fin pude hablar con Gaby acerca de lo ocurrido, me dijo; Tengo mucha pena con Luis por coger con los dos al mismo tiempo, lo que más me apena es que me cogió por mi colita. Qué va a pensar de mí.
Le comenté; no tienes por qué apenarte, si las cosas sucedieron así es porque teníamos ganas los tres, Luis y yo disfrutamos mucho con esa cogida doble que nos disté… Jejeje. Fue maravillosa según comentario de Luis, pues me llama casi todos los días para ver cómo estamos, pero la verdad es qué quiere coger contigo.
Por cierto, ahora que estamos hablando en confianza ¿qué pasa con Paty nuestra comadre?... la he visto que viene frecuentemente a visitarte.
Pues que el muy cabrón de Pepe su esposo le está poniendo el cuerno con una compañera de trabajo, se van a ir a un curso de quince días a Canadá. Está que se la carga la fregada pues ella es muy reservada pero muy caliente, Pepe tiene un mes y medio que ni la toca, su matrimonio va mal, no aguanta más esa situación se quiere desquitar de Pepe con el primer cabrón que se le ponga a tiro por que ya está harta de Pepe. Qué lástima es bonita pareja con su Bebita.
Me habló Luis para invitarme una copa, nos citamos en una cantina que está a la vuelta de mi casa para no tener que manejar con copas, empezamos a platicar de todo y de nada, después de cómo tres tragos cada uno, se nos empezó a aflojar la boca, empezamos a comentar la última vez con Gaby, Luis me comentaba:
Uff, que forma tan rica de coger de tu esposa, nunca imaginé que ¡tuviéramos sexo los tres al mismo tiempo!! (Yo menos) es el mejor sexo que he tenido en toda mi vida, que mujer tienes es maravillosa e increíble qué forma de cogernos tan rica, su panocha tiene perrito es única… Uff y que nalgas tan sabrosas tiene y cómo las mueve.
Le pedí; ya no sigas alabando a mi esposa, que ya me paraste la verga. ¿Te estarás enamorando de Gaby?… Me respondió:
No para nada, es que nunca había estado con una mujer así de buena, con tantos atributos sexuales, con el debido respeto tu mujer es una máquina de placer en la cama, y siempre una gran dama, por eso estoy tan apantallado con ustedes; sabes que los quiero mucho con un cariño fraternal. Le respondí pues si cabrón, pero ya cometiste incesto y soltamos una carcajada.
Luego pedimos más tragos y seguimos platicando de Pepe y Paty, le comenté a Luis lo que pasaba con ellos y me respondió: Pepe me contó que anda con una vieja muy buena que lo trae loco, pero que al rato se le pasaría.
¿Porque no le quemas un tiro a Paty?... anda muy urgida.
Ahí si no me meto, porque no son una pareja estable, ella siempre me ha dado entrada, acuérdate en tu casa en la reunión en que me estaba enseñando la tanga cada vez que cruzaba sus piernas, tenía la blusa abierta y se le veían unas tetotas con los pezones bien parados y quería hacer un Strip tease. Ella sí se puede enamorar de mí y llegar a tener un problema grave con Pepe, no quiero meterme en broncas, si he cortado a todas mis viejas desde la noche que me cogí a tu esposa, es porque con ustedes no hay problema, son estables y Gaby coge mejor que todas mis viejas juntas, no tengo que usar condón, no hay chantajes que no me ha bajado la regla, sé que Gaby solo coge por placer y no por amor estoy feliz con ustedes, pero no la jodan; vamos a coger más seguido, ya no aguanto más, me la tengo que jalar a diario en honor a tu esposa, si no se puede en tu casa vamos a mi departamento cuando quieran, yo compro todo lo necesario. Las palabras de mi amigo me pusieron muy caliente
Pagamos la cuenta y salimos de la cantina, el coche de Luis estaba estacionado enfrente de mi casa y me insistía; dime cuando va a ser la próxima vez… Al calor de las copas y con lo caliente que estaba le respondí; ahora cabrón… Pero no hagas ruido, entramos en silencio hasta a la recamara, mi esposa estaba dormida solo había una pequeña luz encendida, cerramos la puerta y Luis destapo lentamente las cobijas y se quedó con ojos de plato contemplando a mi mujer que tenía un pequeño baby doll de color azul levantado a su cintura y unas pantaletas bikini que medio cubrían sus nalgas, mi amigo quedó extasiado viéndola se sobaba su verga por arriba de sus pantalones. En eso Gaby despierta con un gran sobresalto asustada y nos dice en voz muy baja pero enérgica; ¡qué hacen aquí, largo!!...
Nos salimos corriendo de la recamara y nos fuimos a la cocina a servimos un trago, a los pocos minutos llego Gaby nos reprendió: Miren que borrachera traen los dos no les da vergüenza lo que hicieron, están los niños en casa qué tal si se dan cuenta, te lo voy a decir de una vez, tu hijo el mayor cada vez que tenemos "relaciones" se acerca a nuestra puerta para escucharnos lo he sorprendido dos veces, imagínate si además oye a Luis… pero no te enojes suplicaba él, yo no hago ruido me quedo calladito y Yaa, es que ya no aguanto más, solo quería verte compadécete de mí…
Les voy a preparar algo de cenar para que se les baje la papalina que traen. Gaby con una sonrisa nos comentó: Viendo a este pobre hombre como está de caliente que les parece una “fiesta” para mañana sábado por que hablaron mis papas que llevarían a los niños al circo y luego se quedarían a dormir en su casa. A Luis le brillaban los ojos tenía una sonrisa de oreja a oreja besaba la mano de Gaby. Bueno yo traigo todo para la fiesta no compren nada, a qué hora nos vemos a las ocho dijo mi esposa OK.
Al día siguiente me desperté con una cruda pavorosa y con la verga bien parada le pregunté a Gaby si nos podíamos echar un tirito, me dijo; espera a la noche, se me hizo el día largo, los chicos se fueron con los abuelos eran las seis y media de la tarde, Gaby se metió a bañar, se estaba poniendo un conjunto de lencería (Victoria Secret) cuando tocaron a la puerta, pensé que era mi amigo el «calenturas» que se había adelantado, pero no.
Resulta que era nuestra comadre Patricia que por cierto venia guapísima con vestido escotado, las tetas se veían impresionantes pues calza del 36E. Me pregunto; ¿van a salir a algún lado? Le respondí que Luis nos había invitado al cine, para ver si se iba.
¿Los puedo acompañar?… Le exclamé; ¡por supuesto!
Nuestros planes se venían abajo irremediablemente: a los pocos minutos sonó el timbre de nuevo, me apuré a abrir para contarle a Luis lo que pasaba y esconder en su coche todo lo que traía, se puso la encabronada de su vida, entró a la casa y le dijo a Gaby que si ya nos íbamos al cine. Paty le pregunto si podía ir con nosotros, Luis le contesto que solo había podido conseguir tres boletos y que las localidades estaban agotadas.
Gaby dijo que no fuéramos al cine que regresáramos los boletos y que compráramos algo de beber y de cenar, Paty respondió; no se molesten voy a casa de mi hermana, les llamo luego para ver si nos juntamos. Luis nos apresuró para que ya nos fuéramos pues se hacía tarde y que dejáramos a Paty en casa de la hermana.
Una vez que dejamos a Paty, Gaby nos regañó por mentirosos. Luis dijo vamos a mi departamento para que no nos moleste nadie, tú sabes que lo comparto con nuestro amigo Juan que es piloto aviador comercial, hace como dos meses que no viene, ahora vive con su familia en Monterrey, cuando viene siempre me avisa antes para que lo deje a solas para tirarse a alguna azafata, pues tienen hotel pagado por la compañía aérea, pero lo hace en el departamento para que no los vean sus compañeros de tripulación.
Llegamos al departamento de mi amigo y preparamos unas cubas de ron las cuales nos tomamos rápido, servimos la siguiente ronda más cargaditas en lo que se enfriaban las botellas de Asti Spumanti. Luis puso música suave y empezamos a bailar los tres juntos haciendo un sándwich con mi esposa, sentía el suave movimiento de sus nalgas en mi pinga, acariciaba sus pechos desabrochando su blusa mientras Luis pegaba su verga bien parada al chipote de la pelvis de mi señora. Luis con una mano le desabrochaba la falda y acariciaba las nalgas rozando mi palo que estaba a mil, se besaban trenzando sus lenguas, la blusa y la falda de mi mujer desaparecieron quedando con un mini sujetador de media copa en el cual se podían apreciar parte de sus aureolas rosas que contrastaban con el color negro del sujetador, sus nalgas desbordaban de su tanga, se veían respingonas y sonrosadas, medias negras con liguero y zapatos altos, se veía cómo Diosa porno estaba impresionante.
Seguíamos bailando, ella giraba a veces de frente a mí con unos besos profundos y tiernos, mi amigo por detrás le desabrocho su sujetador, pegaba sus pezones súper duros a mi pecho, Luis no perdía el tiempo acariciando y estrujando sus nalgas y empezó a bajar su tanga al piso y así hincado le besaba, mordía y chupaba su culito, mi esposa gemía suavemente me daba unos besos de fuego, en eso ella se flexiona hacía adelante para desabrochar mi pantalón y darle más acceso a Luis para que le mamara su coñito, mi amigo no desaprovechaba estaba pegado mamando con todo la panocha de mi mujer, sus bigotes desaparecían en la rajita, mientras mi esposa me estaba mamando la verga en una forma deliciosa, tuve que apartarme porque sentía que estaba próximo a venirme, aproveche para desvestirme y recuperar el aliento sentado en la sala viendo el show y saboreando mi trago.
A Luis le escurrían los jugos de Gaby por su boca se tiró en el piso para terminar de desvestirse, mi esposa seguía bailando y ¡hoo sorpresa!! Se había depilado su panocha se veía como actriz porno, solo con su ligero y medias, mi esposa se sentó de espaldas sobre mí y se fue metiendo poco a poco mi pija en su coñito sentía como sus músculos vaginales trabajaban me aprisionaban la verga, quedando de espaldas a mí y jugando de frente con el súper prepucio de la verga de mi amigo, pelando y tapando su verga, chupando unos líquidos transparentes que salían haciendo hebras hasta su boca.
Yo le pedí a Luis que se la cogiera porque estaba nuevamente a punto de venirme, a lo que el rápidamente la levanto y acomodó el estómago de mi mujer en el descansabrazos del sillón, se la empezó a meter muy despacio en posición de perrito pero parados, empezaron los gritos de mi amigo: ¡eres la reina que forma tan rica de coger!! Uff… ¡Me estás mordiendo la verga me la tienes aprisionada!! Gaby no dejaba de jadiar muy fuerte ¡Haagghh que rico!! ¡Métela toda así síiii, así!!! Le venían oleadas y oleadas de orgasmos, yo le quería tapar la boca con mi verga para que los vecinos no oyeran el concierto de gritos y jadeos, se movían como máquinas de coger, la sacaba casi toda y se la volvía a hundir hasta los huevos y gritaba:
¡Qué rico me estás ordeñando!! Luis se estaba viniendo dándole unos empujones tremendos hasta dejar su verga en el fondo de su panocha, estrujando las nalgas de mi esposa con sus manos se las abría para tener mejor vista aprovechando para sobarle su culito, mi esposa sollozaba y gritaba: ¡no la saques déjame sacar toda lechita!! ¡Uff que rico la tienes papacito!! Aplicaba sus músculos vaginales. Luis se convulsionaba y aullaba, yo tome mi lugar a un lado de Luis y cuando se le bajo se salió y entre lo más rápido posible.
Mi esposa empezó a gritar nuevamente, la panocha estaba ardiendo e inundada de leche yo sentía el cosquilleo que me producía la leche de mi amigo, (me estaba aficionando a remover leche, y me gustaba mucho) las contracciones del coño me estaban enloqueciendo con unos orgasmos muy intensos que soltaba. Él cabrón de Luis tenía su verga en los labios de mi mujer, moje un dedo con esperma que escurría de la panochita, y se lo metí por su culito. Al mismo tiempo la estaba bombeando hasta el fondo con el dedo metido en su culito gracias a la posición en que se encontraba, nos empezamos a venir los dos como locos, brotaban chorros y chorros de leche que le dejé bien adentro, cuando mi esposa se desenchufó corrió al baño le escurría por sus muslos el semen de los dos, llegaba a sus rodillas.
Luis estaba feliz, creo que hasta unas lágrimas se le salieron y me decía gracias los quiero mucho, estar con ustedes es lo mejor que me ha pasado, nos servimos otra ronda de cubas y nos sentamos en la sala a tomar, Gaby salió del baño totalmente desnuda y nos dijo: que bárbaros como aventaron leche, me dejaron las medias empapadas por eso mejor me las quité. Tomamos nuestros tragos y serví otra ronda más, nos sentamos en el mismo sillón con mi esposa sentada en las piernas de Luis que no dejaba de acariciarle todo, y empezamos a platicar de lo rica que fue la cogida de los tres al mismo tiempo de la vez anterior, Luis le preguntaba ¿te gustó Gaby?
Sí pero me dolió mi colita, toda la semana fue mucho para ser la primera vez.
¿Hoy nos vas a dar chance?
Pues si me lo hacen despacito y con cuidado sí
Nos empezamos a calentar de nuevo, Luis acariciaba suavemente los pezones y yo sobaba suavemente su rajita sentía el palo de mi amigo pegado a la rajita cuando se le paró parecía que mi esposa tenía una verga, mi esposa me comentó viendo la verga que sobresalía entre sus piernas, por qué no me haces una paja la voy a sentir muy rica, tomé la verga de mi amigo y les empecé a hacer una paja muy lenta aprovechaba para rozarle el clítoris de mi mujer al mismo tiempo que se la pajeaba a Luis, por cierto que rico se siente deslizar el pellejito en la cabeza de la verga la verdad se siente delicioso, suavemente se la seguía moviendo, mi esposa al sentir lo que les hacía se puso muy caliente volteaba su rostro hacia mí y me besaba con fuego luego giraba hacia Luis y lo besaba con lujuria.
Gaby nos platicó de la sensación de tener dos vergas dentro al mismo tiempo: Es lo máximo del erotismo, el dolor tan fuerte que sentía en mi culito como se fue transformando en un placer indescriptible, la unión de tres cuerpos es la cosa más sublime y caliente que he vivido, me sentía como la actriz de las películas porno y eso me calentaba cada vez más. Siempre tengo muchos orgasmos pero en ese momento eran interminables uno tras otro, lo único malo es que no me pude sentar bien en una semana pues me dolía mi colita que era casi virgen. Jejeje.
En ese momento Luis y yo estábamos súper empalmados, mi esposa se pone de pie toma mi mano y me ayuda a hacer la paja, me dice sigue moviendo el pellejito se siente muy rico. Uff que razón tenía Gaby se sentía delicioso estar pajeando la verga de mi amigo nunca lo imagine, mi mujer besaba con lujuria la boca de mi amigo mientras Luis le metía los dedos en su puchita en lo que yo le hacía una riquísima puñeta a mi amigo.
Nos fuimos a la recamara con la hielera tres copas y las dos botellas de Asti, descorchamos una botella y brindamos por nuestra amistad en un cruzadito a fondo. Mi esposa le pregunto a Luis si tenía aceite o vaselina. ¿Creo que no?... ¿Algo lubricante?... Pomada de Vitacilina, pero la tengo en el refrigerador pues estaba muy aguada por el calor. Ve por ella le exclamé. Gaby nos volteaba a ver con cara de asombro.
El regresó y la dejo en el buró, mi esposa se dedicó a mamar nuestras pijas en forma alterna, cautivada por el prepucio de la verga de mi amigo lo pelaba todo y lo tapaba completamente, le sobraba un buen pedazo de pellejo me pone enfrente de Él, junta las puntas y me cubre mi capullo con el prepucio de la verga de Luis, son unas sensaciones increíbles el tener pegadas verga con verga mojadas con la lengua de una hermosa mujer que con su mano corría el prepucio de mi amigo destapando y cubriendo de nuevo mi glande.
Luis se acostó en la cama Gaby se hincó a seguir lamiendo la pija y yo a mamar la pepita de mi mujer que estaba dura y de fuera, sentía un fuerte sabor a semen de los dos, yo nunca lo había probado, estaba agridulce pero me gustó, le mamaba más fuerte a mi esposa jadeaba, se retorcía de placer, la empuje hacia mi amigo, y la senté lentamente en la verga pude ver muy de cerca como el glande poco a poco desaparecía en la vagina de mi mujer, tomé la pomada con mis dedos y se la puse en su culito, me dijo está muy fría pero se siente muy rico, pon más para que no me duela papi. Le metía mi dedo lleno de pomada lo que sobraba se lo ponía a mi verga que parecía de cemento.
Levante a Gaby un poco, suavemente se la fui clavando, mi esposa y Luis jadiaban y gritaban; ¡qué rico se siente!! Mi amigo se empezó a mover lentamente, yo sentía su verga como corría dentro de mi esposa, tome su ritmo cuando él entraba Yo salía era el extremo del placer, el morbo en su máxima expresión los tres estábamos en éxtasis, mi esposa besaba con lujuria a mi amigo yo pellizcaba los pezones de los dos, los orgasmos y contracciones de mi esposa los sentía en mi palo.
En eso estábamos cuando siento una sombra a un costado, me quede petrificado de miedo... De inmediato me desmonté de Gaby. ¡Era Juan!!… Sentí que me moría de vergüenza, nos dijo:
¡Hola!! ¿Cómo están?… A Gaby no le pregunto porque está buenísima…. (El cabrón tenía un gran bulto en sus pantalones.) Los he estado viendo, y cogen de maravilla, parecen de película porno.
Gaby estaba blanca del susto y apenadísima se sacó la verga de Luis, se quería cubrir, pero no atinaba con qué. Luis no podía hablar y solo tartamudeando justificaba; ¡solo es una fantasía de pareja!! Es la primera vez y recalcaba, ¡Gaby es toda una dama!! Fue culpa mía yo los induje.
Juan exclamó; ¡por mí no hay problema!, pero a mí no me van a dejar así mostrando su bulto, además si es una fantasía pues qué mejor que sea entre los cuatro y será un absoluto secreto, pues yo conozco a todas sus amistades, ustedes conocen a mi esposa es amiga de Gaby y no le van a decir nada ¿verdad?… Esto solo queda entre los cuatro ¿heee?...
¡Pero como te vas a coger a mi esposa!! Si solo fue una fantasía y un momento de debilidad ella es una mujer respetable. Eso ya lo sé pero me la quiero coger como lo hace Luis, ¿o quieren que lo sepan sus amigos?...
Lo que nos haces es un chantaje, no la jodas. Pues será lo que ustedes quieran pero me quiero coger a Gaby. Está bien le contesté; mi esposa nos volteaba a ver con cara de asombro como preguntando que debía de hacer. Juan se acariciaba su paquete por arriba del pantalón: entonces si te parece bien me vas a permitir hacerle el amor a tu esposa. Sí ella está de acuerdo adelante, pero está muy mal que la violes. Pero que les cuesta que les ayude a hacer su fantasía, solo es que me calentaron mucho, miren que mujer tan hermosa tengo desnuda enfrente, no voy a decir nada.
Le respondí apenado que por mí no había problema si mi esposa quiere. Mi mujer se acostaba en la cama boca arriba cubriendo sus pechos con un brazo y su panocha con la otra mano, nos mandó una mirada de resignación. Gaby apenada le decía a Juan si mi marido está de acuerdo pues adelante, pero por favor no vayas a decir nada.
Juan se desvistió rápidamente mostrando una verga café pero con la cabeza gorda y rosa con una curvatura muy pronunciada parecía un plátano grueso pero mucho más curvo, Juan es como tres años más grande que nosotros pero se conserva muy bien pues va al gimnasio por qué la vida de piloto es muy sedentaria, está delgado y fuerte sin más subió una pierna a la cama y le acercó su verga a la boca de mi esposa, Gaby sorprendida la tomó en su mano le pajeaba lentamente empezó a pasarle la lengua por su cabeza y a darle chupetes en la punta, pajeando muy lentamente.
Yo tenía mi verga como un malvavisco por el susto y la impresión, Luis estaba igual, pero con una cara de encabronado, pronto escuche a mi mujer jadiar con un sonido suave tenía su boca totalmente llena y se empezó a mover suavemente, Juan cerraba sus ojos y acariciaba los pechos de mi esposa. ¡Mmmhhgg que rico mamas! Mientras le estrujaba una nalga, con la otra pellizcaba su pezón derecho, entonces Juan giró a mi esposa y le acariciaba la rajita, me dijo; con tu permiso que me muero de ganas de meterle la verga a tu mujercita, siempre me gustaste mucho Gaby, pero estás mucho más buena de lo que imaginaba.
Se subió encima de ella y le quiso meter de golpe la cabezota pero no podía, mi esposa le dijo con calma, despacio ella se la fue acomodando y lentamente desaparecía su glande entraba la mitad. Juan decía que apretada estás Uff ¿qué tienes adentro?… Mi mujer le dijo disfruta lo que te voy a hacer, le aplico su mejor técnica de cogida le oprimía la verga con sus músculos vaginales, hacia movimientos cortos y rápidos, luego lo soltaba le decía que la sacara toda y se la metiera nuevamente, Juan aullaba y Gaby gritaba ¡qué verga tan rica tienes cabrón!!! ¡Haagghh Papi me hace ver estrellitas!!
La siento como un gancho que me jala mis cositas por dentro, y ¡me toca otras partes nunca tocadas!! ¡Haagghh me estoy viniendo mucho!! Luis se veía molesto y muy encabronado, nada más nos volteábamos a ver los dos con cara de pendéjos. Mi esposa le dio otro tratamiento como solo ella sabe y los dos se convulsionaron se besaron y terminaron con un gran orgasmo mutuo hasta dejar a Juan bien ordeñado.
Cuando Juan entró al baño Luis empezó a decir, que nos haya sorprendido cogiendo no le da ningún derecho de cogerse a Gaby, ese ojete no respeta ni a su madre, me da coraje que sea tan abusivo, ojalá que ya se largue, cálmate Luis no te enojes le respondió Gaby bueno luego lo discutimos, nos servimos otro trago.
Servimos unas copas de cava y Juan brindo por Gaby la mujer más increíble del mundo y decía: me case ya grande, cogí con más de cien mujeres de todas las formas posibles y sigo echando mis canas al aire, pero nunca había sentido lo que Gaby me ha hecho sentir, lo tenemos que repetir ¿verdad?… Gaby se veía radiante, feliz con una cara de puta, acostada en la cama desnuda escurriendo leche por su coñito rodeada por tres cabrones encuerados.
Mi mujer se fue a asear al baño mientras Luis y yo nos pusimos los calzones y servía otra ronda de vino espumoso, Gaby regresó con su falda y su blusa puesta, estábamos tomando y comentando el susto que nos pegó Juan.
Juan comentaba que nos estaba observando desde que mi esposa nos estaba mamando la verga, y crean son mejores que una película porno además en vivo jajaja. Pensé, esta mujer no se me va sin que yo le meta el pito. Estuve esperando a que llegaran a su clímax, pero ya no aguanté más, para entonces ya me dolían los huevos de verlos.
En eso suena el celular de Luis y ¡era Paty! Le preguntaba a Luis que si ya salimos del cine. Luis le comentó que apenas salíamos del cine tapó la bocina del aparato y nos preguntó qué le decíamos, Gaby le dijo que la invitara porqué ya eran muchas groserías que le habíamos hecho, mi comadrita anda muy caliente y decidida a todo.
Luis le comentó que Juan estaba en el departamento esperándonos y ya vamos para allá, ella respondió; entonces ¿los puedo ver ahí?... Sí claro te esperamos.
Luis comentó y ahora que hacemos viene para acá. Pues primero vestirnos y ventilar tu departamento por que huele a pura leche, luego emborracharla, si Gaby nos ayuda pues nos la cogemos.
Mi esposa sonrió con cara de traviesa, todos nos aseamos, peinamos y nos vestimos, tomamos nuestros lugares en la sala. Pasaron como cuarenta minutos y nada no llegaba, pasó otra media hora y nada Luis le marca al celular contesta disculpándose estaba en un bar, al salir la abordó un galán para invitarle una copa y ella accedió, Luis le comentó; vamos a salir con Juan a cenar, Ok los veo otro día.
Aprovechamos para cenar los bocadillos que había comprado Luis, Juan no le quitaba los ojos a mi esposa mientras platicaban como novios, Luis y yo platicábamos del susto que me pegó Juan. Me comentaba; pinche abusivo el muy cabrón se la cogió, me da mucho coraje; cálmate no vale la pena que tengas un disgusto con él, parece que mi esposa está feliz, nos integramos a la plática de ellos la cual eran puras alabanzas para mi esposa, tienes “perrito” le decía Juan, Luis se lo confirmaba, por eso corté a todas mis viejas pues todas juntas no cogen tan sabroso como Gaby, lo que me has hecho nunca lo había sentido que panocha tan rica tienes, la plática se puso muy sensual, hablando de las nalgas tan ricas que tiene mi esposa, su maravillosa panocha y sus pezones rosas como besitos Hearsey.
Luis se levantó y puso de pie a mi esposa la abrazaba y besaba, de inmediato Juan se puso de pie a un lado de Gaby, la hacía girar deleitándose con las nalgas de mi mujer, le comentaba a Luis que buena está Gaby. Yo no podía contener el morbo de ver a los dos cabrones acariciando y estrujando las nalgas de mi esposa con un bultote en sus pantalones, y la muy juguetona de mi mujer los besaba con fuego ¡al mismo tiempo!! Los tres se rozaban las lenguas y la hacían sándwich entre los dos.
Luis cambió la música por una propia para Strip tease y le dijo a Gaby nos haces un baile erótico, para deleitarnos con la mujer más sabrosa del mundo… Luis la empezó a presentar como si fuera maestro de ceremonias de un cabaret, ¡y con ustedes la Nalgonik!!! Luis la puso de pie ella empezó a bailar lentamente, agachándose y mostrándonos sus tetas por el escote de su blusa, Juan aplaudía yo le gritaba ¡mucha ropa!!.
Mi mujer ondulaba sus nalgas en una forma muy cachonda bailaba muy sensual. Juan grito ¡mucha ropa!! Lo segundamos Luis y yo, Gaby empezó a desabrochar su falda por la parte de atrás, le pidió a Juan que desabrochara su blusa. Juan de inmediato lo hizo, entonces continuo mi esposa se quitó su blusa y retó a Juan, para que le desabrochara el sostén, de inmediato brincó por la espalda de mi esposa lo sacó y se lo aventó a Luis, quedó con sus tetas al aire que se las movía en círculos en las narices de Juan que le daba de chupetes en los pezones.
Los tres gritábamos que era la reina, Juan se empezó a desvestir cuando lo vio Luis de inmediato hizo lo mismo, Juan le preguntaba a mi esposa como se atrevieron a dar este paso, mi esposa le explicaba, es que tu amigo cabrón me puso el cuerno y lo caché, sentí que me moría de celos y coraje pero él me decía que solo fue por hacer una travesura, que debería de hacer lo mismo para que me diera cuenta que no pasa nada solo es coger por coger, me aseguró que podía coger con quien yo quisiera para que me quitara de la mente la obsesión de que me engaño, pasó mucho tiempo hasta que acepté, la petición de mi marido para que cogiera con Luis, esa noche me tomé varias copas para darme valor, estaba borrachita y acabé cogiendo con Luis llevamos poco tiempo.
Mi esposa estaba sentada en el sillón largo con Juan sentado a un lado, mi esposa mientras le platicaba le hacía una lenta paja a su curvada verga, Luis se fue a sentar junto a ella con su verga bien dura con su prepucio cerrado, mi esposa nos confiaba que como es posible que haya tantos tipos de vergas, aquí hay tres tipos totalmente diferentes mientras mi esposa se inclinaba sobre Juan y le daba una mamada profunda, con la otra mano le pelaba la verga a Luis para luego darle otra mamada de lujo luciendo su putería a los amigos.
Yo estaba de mesero de burdel sirviendo tragos a todos, cuando mi esposa se pone de pie y con la voz más cachonda me pregunta; ¿me puedo coger a Juanito?… Claro que sí mi amor y a Luis también mira qué cara de pendejo tiene, sin decir más mi esposa se hinca sobre Juan y empieza a guiar su glande a su coñito con unos sentones ¡con retorcida de nalgas la mitad de la verga ya estaba adentro!! subió de nuevo y se dejó caer quedando toda la verga, enterrada en el coño de mi esposa, Luis tenía los ojos de plato viendo a centímetros la verga de Juan totalmente encajada en el coño de mi mujer. Juan estaba como loco gritando; ¡qué panocha tan rica tienes me atrapa la verga y la jala!! Seguía estrujando con fuerza las nalgas, mamando y mordiendo los pezones.
Luis despertó de la hipnosis salió corriendo por el tubo de vaselina se la aplicaba en el culito de Gaby y en su verga, mi esposa casi saca toda la verga de Juan para recibir la verga de Luis por el culo, de un ansioso empujón se la metió hasta los huevos, mi esposa gritó de placer con un fuerte orgasmo se veía la leche de mi esposa como corría por los huevos de Juan, los tres se movían con todo, yo no aguanté más y le puse mi verga en la boca de mí mujer, me la mamaba como nunca de sabroso mi glande traspasaba su garganta y quedaba a muy cerca de la cara de Juan.
Todo eran jadeos mi mujer no dejaba de venirse las nalgas se le convulsionaban de lo intenso de sus orgasmos mientras gritaba: ¡Haagghh que ricoo me están cogiendo!! Luis con voz ronca gritaba ¡ya me voy a correr! Le abría con fuerza las nalgas a mi mujer y le metía toda la verga, sus piernas le temblaban de la corrida que se estaba pegando dentro del culo de mi mujer, Juan cuando sintió la corrida de Luis también gritaba; ¡qué rico coges!! Le estrujaba las nalgas a mi esposa cuando le enterraba a fondo su plátano chueco, empezó a correrse me contagió y me empecé a correr en la garganta de mi mujer que sintió que se ahogaba con mi leche la sacó y le tocaron varios lechazos en la boca de Juan y en su nariz, Gaby de inmediato le limpiaba la cara con su lengua y lo besaba con fuego pasando una buena cantidad de mi leche.
Mi esposa se limpiaba la leche que le escurría de sus dos hoyitos, yo le reclamé a Juan pero que susto nos diste cabrón, por poco me da un infarto del susto que me pegaste, Gaby nos decía; yo no me podía tapar estábamos acostados sobre la colcha y yo totalmente desnuda entre dos encuerados y tu viéndome con unos ojos que me taladraban la panocha, pinche Juan tan cabrón.
Juan nos platicaba; déjame decirte que he cogido con más de cien mujeres pero ninguna es tan buena para coger como tú, estás buenísima que nalgas tan hermosas tienes, y ¡qué panocha tienes!! Muy apretada con perrito mordelón delicioso, Luis entró a los comentarios: desde la primera vez que cogí con Gaby corte a todas las amiguitas que tenía, ninguna coge ni la mitad de sabroso como lo hace Gaby, había que usar condón, siempre hay el chantaje de no me ha bajado la regla, con ella no hay ningún problema además que los tríos son maravillosos, estás chupando alcohol con el amigo que quieres, la esposa no jode nada pues también se toma sus tragos y luego cogemos en trío.
Cuando Juan sale del baño se viste y se despide de mi esposa con un gran beso, me pide mi dirección porque sabe dónde vivo pero no recordaba el número, él tenía vuelo en la tarde y casi eran las 5.30 a.m. Intercambiamos e mail. Le dice a Luis dame tu número de teléfono porqué extravié mi celular con tu número, por eso no te pude avisar que venía. Qué bueno ¿verdad?… No vayas a decir nada, cómo creen que voy a decir algo y perderme de este bombón, nos dio un abrazo y se fue.
Luis me dijo llévate mi coche mañana me lo traes porque estoy muy cansado, nos vestimos pero nunca apareció la tanga de mi esposa, el cabrón de Juan seguro que se la llevó de recuerdo. Nos fuimos a descansar a nuestra casa.
Cuando nos acostamos le dije a Gaby, estuvo buena la fiesta, Cogiste con tres vergas diferentes, me da gusto que te hayas cogido a Juan para que Luis no se sienta el único y se anden enamorando. Cómo crees Papi si del único que estoy enamorada es de ti, y por cierto que será de Paty, no lo sé mañana le llamo.
El que no tiene madre es Juan, ayer sonó el timbre de la casa, era un mensajero que traía un enorme arreglo floral de rosas rojas y una caja muy elegante para Gaby, mi esposa abrió la caja y puso una cara de admiración tremenda, pues venían tres finísimas tangas preciosas con una nota que decía; ni con cien de estas podría remplazar la tuya, que las tengo guardada como mi más preciado tesoro.