En un año turbulento por razones personales, Chaplin decide realizar un concepto que tenía en mente hace años. La producción no pudo ser más larga y accidentada, pero aun así el resultado es una de las mejores películas hechas por el director. Desde la impresionante habilidad interpretativa de todo el equipo hasta la historia, la coordinación de acción, la edición, etc. Es un testimonio imperecedero de la magistral capacidad de entretener de uno de los directores e intérpretes más relevantes de la historia.

Cambiamos el tono completamente y nos dedicamos a repasar esta influyente película de horror italiana, sin duda una de las más controversiales por sus escenas de violencia y maltrato animal real.

Todos pueden tener sueños. Sueños tan grandes como los edificios que son derrumbados en la ciudad costera de Atlantic City, que trata de lavarse de su historia de crimen legalizando los casinos, algo tan incongruente como las intenciones Lou o el ex esposo de Sally que buscan salir de su estado de mediocridad con algún nuevo truco ilegal. Como es de esperarse, terminan involucrando a Sally en sus conflictos. Atlantic City muestra la mediocridad y decadencia del sueño americano de una forma que solo un francés podría lograr. Susan Sarandon y Burt Lancaster y el resto del reparto brillan por sus interpretaciones, Malle nos deja ver a la desgastada Atlantic City mientras sigue los paseos de los personajes, moviendo la cámara sólo lo suficiente. Fue un gusto revisitar esta película.

Todos pueden tener sueños. Sueños tan grandes como los edificios que son derrumbados en la ciudad costera de Atlantic City, que trata de lavarse de su historia de crimen legalizando los casinos, algo tan incongruente como las intenciones Lou o el ex esposo de Sally que buscan salir de su estado de mediocridad con algún nuevo truco ilegal. Como es de esperarse, terminan involucrando a Sally en sus conflictos. Atlantic City muestra la mediocridad y decadencia del sueño americano de una forma que solo un francés podría lograr. Susan Sarandon y Burt Lancaster y el resto del reparto brillan por sus interpretaciones, Malle nos deja ver a la desgastada Atlantic City mientras sigue los paseos de los personajes, moviendo la cámara sólo lo suficiente. Fue un gusto revisitar esta película.

Visconti toma el desafío de llevar al cine una obra del escritor Thomas Mann: Un italiano usa la obra de un alemán para adaptar un relato introspectivo a un lenguaje visual, con un intérprete inglés. El compositor Gustav von Aschenbach (Dirk Bogarde), viaja a una Venecia infestada por el cólera para huir de sus problemas personales. En un lujoso hotel observa a un niño que representa un ideal de belleza clásica que lo irá obsesionando trágicamente. El contraste de lo bello de las imágenes con la decadencia del personaje principal, el lento ritmo que nos permite percibir la excelente interpretación de Bogarde y los adecuados movimientos de cámara que nos llevan a comprender en qué fija la atención el afligido Gustav, hacen de esta obra una muestra imperecedera de la calidad de Visconti como director.

Visconti toma el desafío de llevar al cine una obra del escritor Thomas Mann: Un italiano usa la obra de un alemán para adaptar un relato introspectivo a un lenguaje visual, con un intérprete inglés. El compositor Gustav von Aschenbach (Dirk Bogarde), viaja a una Venecia infestada por el cólera para huir de sus problemas personales. En un lujoso hotel observa a un niño que representa un ideal de belleza clásica que lo irá obsesionando trágicamente. El contraste de lo bello de las imágenes con la decadencia del personaje principal, el lento ritmo que nos permite percibir la excelente interpretación de Bogarde y los adecuados movimientos de cámara que nos llevan a comprender en qué fija la atención el afligido Gustav, hacen de esta obra una muestra imperecedera de la calidad de Visconti como director.

En esta oportunidad invitamos a Pola Lecaros para hablar de la obra que comienza la trilogía del apartamento, que dejó una marca en el género del horror. Es una oportunidad para reflexionar sobre cómo una obra refleja el fuero interno del director, los abusos, las víctimas y otras cosas desagradables... Pero no se preocupen que todo será aderezado con humor negro. Así que sin ofenderse

El aclamado director español Luis Buñuell hace nuevamente noticia con esta película donde la realidad es indistinguible a la fantasía. Severine, una mujer de clase alta con problemas para relacionarse con su marido, decide ir a un burdel para que, cumpliendo sus fantasías, pueda abrirse en su matrimonio. Este film fue sumamente controversial fue el broche de oro tanto para Buñuel como para la excelente Katherine Denueve, la "reina del hielo", que sería un ícono francés con una carrera envidiable durante décadas. Llena de personajes ambiguos, con una paleta de colores particular y con un detalle en el set y vestuario, la película juega con nuestra percepción pero mantiene firme la atención gracias a una certera interpretación por parte de los actores. Un clásico de 1967 imperdible para cualquier amante del cine.

Analizamos la película que consolida a Fellini como uno de los más grandes directores de Italia y de los más influyentes de la historia. Esta vez recorremos los recuerdos y fantasías asociadas al pueblo natal del director, lleno de personajes caricaturezcos que reflejan a Fellini en vez de representarse en el papel protagónico como fue en el caso de algunas de sus películas influyentes previas a ésta. La narración en retazos, la música y la fotografía sirven para retratar momentos más que un relato lineal, lo que puede molestar a los obsesionados con la continuidad pero maravillas a los amantes del cine. Acompáñanos nuevamente a revisar esta entretenida y querida película de un Federico Fellini en la cima de su creatividad.

The French Connection no sólo fue el primer éxito comercial de Friedkin sino que su influencia se extiende a lo largo de la década de los setenta en el género policial. William Friedkin tenía experiencia en la TV y documentales, lo que se puede percibir en el rodaje y en la estética de una película, que por la misma naturaleza del proceso de producción, no ha podido ser igualada. En ella "Popeye" Doyle encabeza una obsesiva investigación sobre la importación de droga desde Europa a EE.UU. en la que el único objetivo es atrapar a una astuta y elegante presa, sin lidiar con ninguna consecuencia. Gene Hackman interpreta al indolente Doyle y Fernando Rey al escurridizo Charnier en esta ficción basada en un caso real, asesorados por los mismos protagonistas. Hablamos de fotografía, del proceso de direcciones y otras hierbas mientras repasamos a la película con la escena de persecusión más famosa de la segunda mitad del siglo XX. Si es un clásico que no has visto: escúchanos. Quizás te convenzas que este es un clásico que definitivamente verás.