[Este programa fue emitido antes del fallecimiento, el 13 de marzo de 2025, de la compositora Sofia Gubaidulina, a quien está dedicado]
En esta edición de Ars Sonora —que dialoga con la anterior emisión de nuestro espacio— exploramos las posibilidades del órgano en la música de dos compositores procedentes de la Unión Soviética: Sofia Gubaidulina y Alfred Schnittke. Retomamos así el amplio ciclo que, a través de diferentes series, venimos dedicando a ese instrumento desde 2021, con objeto de tantear algunas de las resonancias de este antiguo dispositivo (muy similar, en varios sentidos, a los sintetizadores actuales) en algunos planteamientos estéticos desarrollados en las últimas décadas.
La emisión comienza con "Luz y oscuridad", una obra compuesta en 1977 por Sofia Gubaidulina. A través de contrastes intensos entre fraseos vertiginosos y notables disonancias melódicas, la compositora explora la dualidad entre lo divino y lo demoníaco, entre la luz y la oscuridad. Este trabajo, que refleja la profunda espiritualidad de la autora, también expresa la búsqueda de un equilibrio entre fuerzas opuestas, rasgo que puede considerarse una constante en su obra.
A continuación escuchamos las "Dos pequeñas piezas para órgano" escritas por Alfred Schnittke en 1981. Estas composiciones destacan por sus marcadas disonancias (como también sucedía en la audición anterior), así como por su ominosa atmósfera, generada desde los registros extremos del órgano, movilizados aquí para crear una experiencia sonora inquietante. Interpretadas por el organista alemán Friedemann Herz, estas piezas ofrecen una perspectiva poco habitual, pero profundamente evocadora, dentro del catálogo de Schnittke.
Nuestra exploración radiofónica continúa con "Cantus perpetuus", una obra de Schnittke para órgano y percusión fechada en 1975 que incorpora en su procedimiento compositivo elementos de aleatoriedad. En esta pieza, interpretada por el organista Alexey Semyonov y el percusionista Mark Pekarsky, los músicos improvisan a partir de una partitura gráfica que simboliza un viaje sonoro entre diversos temas seriales, articulado principalmente a través de la interacción entre el órgano y las campanas tubulares.
Cerramos el programa con "Detto No. 1" de Sofia Gubaidulina, donde el órgano se combina nuevamente con la percusión, en una interpretación de Alexey Semyonov y Viktor Grishin. Esta obra transita por estados emocionales que van desde la contemplación meditativa hasta la rabia furiosa, para regresar a un estado reflexivo, en una muestra más del carácter profundamente sensual, a la par que religioso, de la música de Gubaidulina.
Con esta emisión, al igual que con la precedente, queremos rememorar —como ya hemos hecho en otras ocasiones durante los últimos meses, mientras les ofrecíamos en Ars Sonora composiciones realizadas por autores ucranianos y rusos— a las víctimas de esa cruel invasión que la Rusia de Putin inició el 24 de febrero de 2022, y que constituye el mayor ataque militar en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, causante ya de cientos de miles de bajas militares y decenas de miles de bajas civiles ucranianas. Mediante la escucha de los trabajos aquí presentados se intenta recordar, también, que la cultura y el arte rusos han adoptado formas, a través de los años (y de los siglos), que nada tienen que ver con la crueldad reiteradamente demostrada por Putin, ni tampoco con su régimen, caracterizado por la corrupción endémica, el encarcelamiento y la represión de los opositores políticos, la intimidación y represión de los medios de comunicación independientes y la falta de elecciones libres y justas —tal y como confirman todos los informes emanados de los organismos internacionales más reputados, desde Amnistía Internacional hasta Reporteros Sin Fronteras, e incluso el Tribunal de La Haya—.
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