Las madrugadas del 11 al 12 y del 12 al 13 de agosto serán ideales para disfrutar de un espectáculo astronómico excitante, una lluvia de estrellas fugaces. Una estrella fugaz es una mota de polvo de tamaño de un grano de arena que penetra en la atmósfera terrestre a velocidades increíbles, si se trata de una Perseida, se internará a 60 km/s. Esa mota de polvo, antes de convertirse en estrella fugaz ha tenido una vida azarosa. Tuvo su origen en un cuerpo del tamaño de una enorme montaña de unos 26 kilómetros de ancho que los seres humanos han denominado con los nombres de sus descubridores Swift-Tuttle. Hoy contamos la historia.