En la invasión que Rusia ha perpetrado en Ucrania, el gigante euroasiático está utilizando todo lo que tiene a su alcance para mantener su maquinaria bélica en funcionamiento. A medida que la disponibilidad de las armas regulares va decayendo, va echando mano a soluciones cada vez más creativas y... ¿discutibles? Pero Rusia no es el único país que utiliza tecnología teóricamente muy vieja, como el código Morse. Tanto los estados unidos de América, que hasta hace cuatro días conservavan el control de su arsenal nuclear en disketes, hasta muchos países europeos, hay motivos variados por los que estos estados usan tecnologías de otro tiempo, en tiempos de robotización, satélites y drones.

Mientras China está acumulando unos números en el despliegue de sus energías renovables impresionantes en los pasados tres años, en España una parte fundamental del sector ha entrado en crisis, se trata de las empresas más nuevas y que han crecido más rápido al calor del aumento del autoconsumo, y que jugaron a ser grandes convirtiéndose en comercializadoras energéticas; una situación extraordinaria de vientos a favor hizo que algunas startup no muy grandes se convirtieran en gigantes, Por qué, y qué está pasando ahora mismo?

Google ha puesto sobre la mesa, para empezar, 1000 millones de dólares para encontrar una solución al gran problema que en los próximos años va a plantear la inteligencia artificial: No, no hablamos de una gran singularidad que supere a los humanos, sino del crecimiento exponencial del consumo de energía, que no sólo está poniendo ya en jaque ciertas regiones en lo que se refiere al suministro de electricidad, si no que amenaza con emborronar el sello de "empresa verde" que algunas de las grandes startup del planeta persiguen para liderar la transición a la descarbonización.

Cada vez más organizaciones se dedican a monitorizar y exponer los movimientos de algunas de las personas más famosas, ricas, poderosas o todos esos atributos al mismo tiempo con aplicaciones y métodos más o menos sofisticados, que devuelven en un ranking de las personas que provocan mayores emisiones de C02 con sus medios de transporte privados, principalmente los jets privados. ¿sabes quiénes son? ¿Crees que tiene sentido que algunos de ellos sean los mayores líderes en la lucha contra el cambio climático? En el ranking aparecen personajes como Bill Gates o Elon Musk. En este vídeo te doy unas cuantas pistas.

Mientras el PIB de España crece claramente por encima de la media de lo que lo hace en la UE, nuestros gobernantes sacan pecho, e incluso afirman públicamente que la economía española "va como un cohete". Existen sin duda algunas señales muy positivas en la salud actual de nuestra economía, pero lo cierto es que cuando se analiza la foto completa y se lleva más allá de la situación coyuntural, afloran todas las debilidades y saltan las costuras. Esto es lo bueno y lo malo que tiene la economía española, y cómo por mucho que nos vendan, estamos lejos de ser un cohete, tanto para lo bueno, pero también para lo malo. La mediocridad y el estancamiento en el fondo son las tónicas que han venido para quedarse.

Te cuento vivido desde dentro el caos que están viviendo las líneas de AVE en la estación de Chamartin, especialmente, pero también en todas, desde que el sistema se ha privatizado, y se ha decidido ampliar la estación coincidiendo con la llegada de nuevos operadoras. La falta de inversión en infraestructuras y calidad en la organización va a hacer que en los próximos meses y años suframos un servicio que cada vez se va a ir degradando más, mientras nadie hace nada por remediarlo, sólo dejarse en evidencia con el fin del compromiso de puntualidad de 30 minutos.

Los científicos son muy buenos en muchos campos y lacitos, pero hay uno que se nos resiste. La predicción de fenómenos a largo tiempo es un desastre. Sin embargo nos empecinamos una y otra vez en hacer predicciones que nos dejan en ridículo. Cuál es el motivo? Que se pierde y gana con todo esto? Pque herramientas tiene un ciudadano normal frente al apocalipsis?

En este vídeo detallamos los últimos movimientos en el conflicto que mantienen Rusia con Ucrania, por el que la civilización y cultura rusa cada vez depende más del apoyo comercial de China, una debilidad que, con el flanco de oriente totalmente desprotegido, podría hacer que china aprovechara para esquilmar de manera más agresiva los ingentes recursos naturales de la zona siberiana de aquel país. Mientras tanto, parece que el conflicto se enquista por el desinterés de ambas partes en llegar a un acuerdo supervisado por tereros.