Temas a tratar: 

1. Una pregunta honesta
2. Juez justo

Desarrollo:

1. Una pregunta honesta

Un sello es oposición a la luz. Cuando la luz brilla en la oscuridad, la oposición es inevitable. 

Sabemos que vendrá la justicia de Dios pero queremos saber cuando.

La respuesta de Dios es: descansa. 

Apocalipsis 6:9-10 (RVR1960)
“Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos.”

El cordero no es el único que ha sido sacrificado. Los mártires dieron su vida por causa del evangelio.

El alma está en la sangre (Levítico 17:11). Cuando Caín mató a Abel “su sangre clamaba”, el poder de la sangre clamando por justicia.

Cuando uno da su vida en sacrificio, experimenta el poder de la resurrección. 

Al matarnos, el mundo se ha juzgado a sí mismo.

La justicia social, no es venganza. 

Los mártires confían en la justicia de Dios.

Esteban oró por el perdón de sus asesinos (Hechos 7:60), al igual que Jesús (Lucas 23:34).

Nosotros no buscamos venganza

Juan también fue sentenciado a muerte, pero Dios le conservó la vida.

Cuando Juan recibe esta revelación, al llegar al quinto sello, él ve a personas conocidas.

Este es un consuelo para todos los cristianos, aquellos que dieron su vida ahora están en la presencia de Dios.

2. Juez justo

¿Cuándo vendrá el juicio? Cuando el número esté completo, cuando el testimonio de ellos esté completo, Jesús vendrá. 

Cuando permanecemos fieles, haciendo brillar la luz de Jesús, las actitudes y acciones de este mundo están siendo reveladas.

Dios ha creado un espacio de gracia para que las personas puedan ser redimidas. Este es el amor de Dios.

La ropa blanca significa justicia.

Dios no se ha olvidado, podemos descansar en que hay un juez justo.

Nadie podrá decir que el juicio de Dios es injusto (Apocalipsis 16:7 / Salmos 119:137).

La ropa blanca también significa festividad.

Es una celebración porque saben que el dolor de este mundo es temporal y vale la pena por lo eterno.

Hoy en día hay más mártires cristianos que en cualquier otro momento de la historia de la iglesia. Dios no se ha olvidado de ellos, él los conoce.

Ver toda esta escena y escuchar las últimas palabras de Esteban (Hechos 7:54-60) marcó la vida de Pablo.

Es por esto que él declara: “para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia” (Filipenses 1:21).

El corazón de Dios es amor, él da tiempo para que la humanidad cambie.

El hombre es muy pronto para el juicio.

Dios es tardo para el juicio, pero pronto para amar y dar otra oportunidad.

Hay un costo por seguir a Cristo.

Nadie se escapa de la justicia de Dios.