Hay fuegos que no llegan para destruirte, sino para revelarte. 🔥
Ezequiel 20 nos recuerda que el fuego de Dios no siempre es castigo, muchas veces es purificación. Él no quemó a su pueblo para acabar con ellos, sino para consumir todo lo que los alejaba de Su propósito. Así obra también en nosotros: a veces Dios permite que todo arda, no para terminar contigo, sino para que surja lo nuevo que Él ya preparó.
La fe no se prueba en los días tranquilos, sino en las temporadas donde todo parece consumirse”. Y Hebreos 9 nos muestra la clave: Jesús no solo ofreció un sacrificio perfecto, sino que abrió un nuevo camino, donde el fuego ya no destruye, sino que transforma.
Si hoy sientes que algo está ardiendo en tu vida, recuerda esto: el fuego no fue el fin, fue el inicio de algo nuevo. 🌾 Dios está refinando tu historia, no quemándola.
📖 Lecturas:
Ezequiel 20:1–43
Hebreos 9:11–28
Salmo 107:1–43
Proverbios 27:11
www.wenddyneciosup.com
Sígueme en mis redes como @wenddyneciosup
Distribuido por: Genuina Media
Hosted by Simplecast, an AdsWizz company. See pcm.adswizz.com for information about our collection and use of personal data for advertising.