Gedeón, entre otros jueces, llamará a Israel a renovar su compromiso con el Dios verdadero y serán ellos los que experimentarán la acción de Dios en sus vidas, convirtiéndose en testigos para Israel. El evangelio confronta nuestra manera de pensar y de vivir nuestra fe, pues nos desafía a la generosidad, sin lugar a mediocridades o escapes a la realidad. Dios opta por lo pequeño, por lo pobre, lo humilde, que para nosotros es imposible, pero no para Él. ¡Conviértenos, Señor, a tu Evangelio!