Nuevo episodio de La Paella Rusa y esta vez con una dosis extra de nazismo. O no. Porque aunque el multimillonario sudafricano realizó (dos veces) en la investidura de Trump lo que, sin ser expertos en simbología del III Reich, podemos calificar como saludito inspirado en Adolf Hitler, sus acérrimos seguidores se empeñan en contarnos que o bien nos está lanzando su corazón o bien es autista y no sabe controlar bien su lenguaje corporal. ¿A quién vas a creer, a tus ojos o a un propagandista de extrema derecha? Y mientras nos cuentan que Musk es neurodivergente, pero muy cariñoso (algo, bastante woke, por cierto), su amigo Donald Trump ha decidido empezar su legislatura por todo lo alto: aprobando deportaciones masivas de migrantes. Se nos está quedando un panorama niquelado, para entrar a vivir, vaya.

Además, esta semana La Paella Rusa se adentra en el fenómeno Ozempic. Diseñado originalmente para tratar algunos tipos de diabetes, este tratamiento lleva un tiempo convertido en la estrella de Hollywood en cuanto a adelgazamientos salvajes se refiere. ¡Y ya está llegando a Españita! ¿Los efectos secundarios? Jaja, pa qué quieres saber eso, saludos.

Por otra parte, hace algunos meses, hablamos de la magia lingüística de sintagma ‘Decreto ómnibus’. El término vuelve a nuestras vidas ahora que PP, Vox y Junts han dicho que mejor que no a un combo todo-en-uno de medidas gubernamentales entre las que se incluían desde la revalorización de las pensiones hasta ayudas para el transporte público o la prohibición del corte de suministros básicos a ciudadanos vulnerables.

En este capítulo de La Paella Rusa contamos también con una nueva entrega de la ya célebre sección “¿Qué ha hecho esta semana el exteniente general del Ejército de Tierra, vicepresident y conseller para la Recuperación Económica y Social, Francisco José Gan Pampols?”. Esta vez, el interrogante va acompañado de una sospecha: ¿es posible que Gan Pampols sea un ultraizquierdista infiltrado? Y como no podía ser de otra manera, nos asomamos una vez más al minuto y resultado de la Liga Villaconejos (llamada Hypermotion por algunos indocumentados).

En nuestra recomendación cultural, desde La Paella Rusa os proponemos leer la novela El holandés, de Elisa Ferrer (Tusquets). ¡Dentro sinopsis! “En el Benidorm de finales de los años ochenta, un hombre con una ambición desmedida tuvo un chispazo de genialidad delictiva haciéndose pasar por quien no era. Estaba obsesionado con lucrarse con la venta del último solar disponible en primera línea de mar; el problema es que ese terreno no le pertenecía. Con un plan descabellado, engatusó a un inversor y se embolsó cuatrocientos millones de pesetas. El episodio fue la mayor estafa cometida en la ciudad alicantina. Tras el sonado golpe se escondía un tipo conocido como Rafael (aunque también fue Honorato, Miguel Ángel, José Luis…), dueño de un pequeño bar y gerente de una discoteca, además de otros negocios turbios. En la prensa local fue apodado como el Rey de los Bajos Fondos. ¿Qué puede contarle Rafael a una escritora y guionista sobre su caso?”.

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