Palabra de Dios: “¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! Porque así hacían sus padres con los falsos profetas.” Lucas 6:26
La sal de la tierra: “Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.” Mateo 5:13
La luz del mundo: “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.” Mateo 5:14
Perlas: Cuando el Señor nos reta a perdonar, bendecir y amar a nuestros enemigos, nos preguntamos:¿Cómo puedo llegar a vivir esto?¿De verdad es posible que mi corazón llegue a ese punto, de no solo perdonar a mis enemigos sino bendecirlos? Y también nos preguntamos…¿Realmente necesito hacerlo? ¿Es este mensaje para mí? ¿Acaso yo tengo enemigos?
La respuesta a las primeras preguntas es Sí es posible porque todo lo que Dios nos pide que hagamos, Él mismo nos capacita y nos ayuda, TODO lo podemos en Él, aunque nos parezca imposible o impensable, la verdad es que con Él habitando dentro de nosotros, sí podemos.
La respuesta a las últimas preguntas… Es Sí necesitas hacerlo, el mensaje sí es para ti y para mí, y para todo aquel que se llame seguidor de Cristo; y en cuanto a la última pregunta es: ¡OJALA QUE SÍ! Ojalá que sí tengas enemigos. ¿Por qué digo eso? Te explico… Si de Jesus dijeron toda clase de males, fue burlado, pisoteado, criticado, etc., ¿cuánto más nosotros quienes le seguimos? Es un hecho. Si seguimos a Jesús, vamos a tener enemigos. Jesús anunció que seríamos aborrecidos por causa de Su nombre.
Juan 15:18-19 “Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros. Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece.”
Si elegimos vivir una vida de acuerdo a los principios de Dios, vamos a ser señalados, rechazados y perseguidos.
Si tú no tuvieras enemigos, sería preocupante. Leímos “Ay de vosotros cuando TODOS los hombres hablen bien de vosotros!”. Si no tuvieras enemigos, esto querría decir que la vida de Dios no se está notando mucho en ti, no estás desentonando mucho, ni iluminando, ni salando. Es decir, estarías siendo parte y encajando perfectamente en el mundo. PERO, estás llamado a ser sal y luz, en otras palabras, tus comportamientos como cristiano tienen que ser DETECTABLES Y NOTORIOS, debería ser evidente que eres diferente.
Si el comportamiento de una persona, su proceso de pensamientos, y su sistema de valores no es diferente al del resto del mundo, esa persona debería preguntarse si tal vez ha regresado al mundo, o tal vez nunca realmente ha salido de allí; es más, preguntarse si realmente es cristiano. Sé que es una afirmación fuerte, pero si una persona sigue a Cristo, inevitablemente será diferente, muchos los amarán y mucho lo rechazarán, tal como ocurre con Jesús mismo.
Si estás siendo atacado, vituperado, rechazado, difamado…¡gózate! Quiere decir que estás compartiendo los sufrimientos de Cristo, y Él mismo te recuerda que antes que te aborrecieran a ti, lo aborrecieron a Él. Y esta palabra de Jesús para ti hoy: “Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos.” Mateo 5:11-12
Además, vienen muchas bendiciones aquí en esta tierra. La Palabra dice también que: “Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días.” Salmos 23:5-7
Lee completo este devocional descargando nuestra app: https://urlgeni.us/0MujO