Hoy te invito a recorrer el camino de la respiración. A volver a ese ancla sutil pero constante que siempre está contigo… La respiración como refugio, como ritmo que acompaña, como punto de encuentro con el ahora.

En esta meditación guiada vamos a observar cómo entra y sale el aire, cómo cambia el cuerpo con cada inhalación… con cada exhalación…Y poco a poco, te iré guiando para que explores distintas duraciones del aliento. Ampliamos… alargamos… y ajustamos el tiempo de inhalar y exhalar,

no desde la exigencia, sino desde la curiosidad y la escucha interna.

Puedes hacer esta práctica sentada, tumbada, como estés más cómoda o cómodo.

Solo asegúrate de estar en un lugar tranquilo, donde puedas cerrar los ojos si lo deseas…

y simplemente permitirte estar.

Gracias por estar aquí. Gracias por regalarte este momento.