Este año se han dado las condiciones ideales para que tenga lugar un brote de langosta marroquí en las regiones del norte y el noreste de Afganistán, la principal zona de producción y reserva de trigo del país. Un brote podría provocar pérdidas de cosechas de entre 700.000 y 1,2 millones de toneladas métricas de este cereal, deteriorando la seguridad alimentaria de toda la región.