Cuando le preguntaron a Byron Katie ¿Cómo le hace para lidiar con la guerras y sufrimiento del mundo? Ella contesto: “No puedo terminar las guerras ni con el sufrimiento del mundo, pero puedo terminar la guerra conmigo misma.”

En este episodio toco un tema sensible: La situación actual de Afganistán y me hago una pregunta importante. ¿Cómo podemos actuar en una forma que realmente contribuya a la paz y amor en el mundo?

Los guío por mi propio proceso espontáneo, usando la técnica de claridad para ofréceles una visión distinta al enfrentarnos a problemas tan grandes come éste.

Cuando vemos las atrocidades que ocurren en el mundo nos sentimos tristes y enojados. Dividimos a los involucrados en víctimas y victimarios… sentimos al mismo tiempo compasión por los primeros y odio por los segundos. ¿Pero es esta una compasión real?

Lo que no nos damos cuenta es que en este proceso creamos odio y separación en lugar de amor y contención. Al mirar con tanto odio al régimen talibán en este ejemplo, quisiéramos que no existieran, que terminaran con ellos. Es decir, nos convertimos en talibanes en nuestras propias mentes…

Los grandes maestros como Byron Katie nos enseñan que cuando tenemos una mente clara podemos encontrar paz en nosotros mismos y ofrecerla a los demás. Este es el verdadero significado de compasión; poder ver al “enemigo” como un amigo confundido, poderlo perdonar por su confusión porque sabemos que nosotros también nos confundimos (muchas veces) al creer pensamientos falsos que nos hacen actuar en formas que nos dejan llenos de vergüenza y culpa.

De esta manera no justificamos sus hechos ni los perdonamos de la justicia si fuesen enjuiciados, pero los dejamos de odiar, les permitimos ser Luz detrás de su sombra, encontramos puntos que nos unen y les mandamos amor en sus procesos de evolución.

 

Namaste Durga Stef